Más de 20.000 personas han estado de madrugada en Madrid celebrando el Mundial femenino
Fiesta irrepetible con la selección: 20.000 personas celebran en Madrid un Mundial para la historia
Con Camela cogiendo el testigo de Manolo Escobar en celebraciones de un Mundial de fútbol, las jugadoras campeonas del mundo se dan un baño inolvidable con momentos muy emotivos
España, representada en la ciudad de Madrid, se echó a la calle para celebrar lo que era impensable, todo un Mundial femenino. Uno de los grandes éxitos del deporte español en décadas se festejó a la altura de lo que ha supuesto un triunfo histórico.
Las 23 jugadoras y el cuerpo técnico se han dado un baño de cariño y admiración en la calurosa madrugada de la capital de España. Banderas, pancartas y gritos para reconocer lo que es un hito que el fútbol español tardará en olvidar. Hubo lágrimas entre las niñas que aguantaron horas para ver a sus ídolas. Son lágrimas de emoción.
Y eso que la celebración se quedó apagada por el enorme cansancio de las jugadoras. Normal tras un vuelo de ¡24 horas! Fue bajar del avión y subirse al autobús y encontrarse con el delirio de la afición. ¿Por qué no se hizo esto el martes con más calma y con las jugadoras más descansadas? Una pena.
Hasta pasadas las doce de la noche no se inició la fiesta en la explanada Puente del Rey, al lado de Príncipe Pío. Antes se dieron un paseo desde la Puerta de Alcalá en un autobús descapotable. Fue descafeinado porque la hora y la temperatura no acompañaban. Pero la fiesta en Madrid Río fue apoteósica con más de 20.000 personas. Ahí sí hubo un derroche de alegría.
Cariño a Olga Carmona
Especialmente emotivo fue el manteo a Olga Carmona, la heroína de España, la autora de los dos goles más relevantes en la historia del fútbol femenino español. La mujer que perdió a su padre a la vez que ella ganaba un Mundial. Sus compañeros la cuidaron y fue con diferencia la más aclamada. «Por momentos fue el mejor día de mi vida y luego se convirtió en el peor, estoy emocionada de brindar esta alegría al país», dijo una emocionada Carmona.
La capitana Ivana Andrés (cogió el brazalete tras la revuelta) brindó el título al país y lo gritó con fuerza: «Qué viva España». Y Jorge Vilda, en el momento más esperado, dio hasta las gracias a «todas las jugadoras que no han estado en este Mundial». Algún pito se escuchó.
Jenni Hermoso cogió el micrófono por voluntad propia y resumió el «orgullo» de que España se haya volcado y reivindicó a su ciudad, a su Madrid: «Soy española hasta la médula, pero viva Madrid». Y entró en ese momento el grupo Camela, amigos de Hermoso, y el delirio fue total. Difícil encontrar algo que una más a este país que Camela, que cogió el testigo de Manolo Escobar en lo que a celebración de Mundiales de fútbol se refiere.
Jenni Hermoso, con el Palacio de Cibeles detrás: España es campeona del mundo
Y Sueño Contigo sonó con toda fuerza. Más sueño que el de ver a España femenina ganando un Mundial era difícil. Después llegó Vicco con su Nochentera. Y Juan Magán. Y entre medias fueron hablando las campeonas, menos Alexia Putellas, que solo ella sabrá porque no quiso transmitir alegría, hablar y estar feliz. Fans esperaban a la futbolista más mediática, a la más internacional, pero ella ni siquiera cogió el micro para dar las gracias.
No empaña esto una celebración a lo grande en lo que miles de personas aguantaron hasta más de la una de la madrugada para vivir algo irrepetible. España es la mejor del mundo en fútbol femenino.
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