Luis Rubiales, durante la final del Mundial femenino en Sídney
El Gobierno argumenta ahora que Rubiales «dañó la imagen de España» para que el TAD le suspenda
Tras su naufragio en el plan por inhabilitarle por «abuso de autoridad» ahora el Ejecutivo cambia de estrategia y utiliza este argumento
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Después que el Gobierno de España naufragara en su denuncia al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) y su plan para inhabilitar de forma rápida a Luis Rubiales, ahora el Ejecutivo busca otra vía: que el propio TAD le suspenda al menos de forma cautelar.
Y se lo solicitan porque, dicen, Rubiales «está afectando a la imagen del deporte español y de España». Eso figura en el escrito del Consejo Superior de Deportes (CSD, que depende del Gobierno), en el que también añaden que solicitan esto «no sólo por la enorme repercusión nacional e internacional que está teniendo, sino también por los efectos en las relaciones con federaciones internacionales, estando en juego la organización del Mundial de 2030».
Es decir, el Gobierno argumenta al TAD que hay que suspender de forma cautelar a Rubiales para salvar el Mundial 2030, torneo que aun no tiene sede, por el que pelea España (junto a Portugal y Marruecos) y que la FIFA otorgará en 2024. Y, como se ha mencionado, por «dañar la imagen de España».
Este cambio de criterio del Gobierno llega después de que el Tribunal echara atrás la denuncia del propio Gobierno, que pidió la inhabilitación inmediata de Rubiales por «abuso de autoridad». Sin embargo el TAD dijo que eso no hay, que sí hubo infracciones contra el decoro, y que la infracción no es «muy grave» sino solamente «grave» y por tanto su inhabilitación máxima solo puede ser de dos años (si es que la hay) y que no se le puede inhabilitar ya.
Según el Gobierno en aplicación del articulo 102 de la Ley del Deporte el CSD puede instar a suspender temporalmente a Rubiales hasta que se resuelva el expediente. «No puede hacerlo directamente el CSD, pero sí puede hacerlo el propio TAD», recordó el ministro Iceta en su comparecencia de este viernes. Esta es una petición prácticamente a la desesperada toda vez que el plan del Gobierno no ha sido fructífero.
Y lo que hace el Ejecutivo es ahora cambiar de criterio y pedir la suspensión cautelar por «dañar la imagen» de España, algo que ya avanzó Pedro Sánchez en un mitin este sábado en Málaga: «Uno puede aspirar a representar a España y dejar mal a España con actitudes y discursos que nos abochornan y que no nos representan».
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