El Liverpool está inmerso en una de las peores crisis de su historia
La crisis del Liverpool: de gastarse 450 millones y soñar en grande a provocar un terremoto en Anfield
El conjunto red ha perdido nueve de sus últimos 12 partidos y Arne Slot, la cabeza visible del proyecto, está viendo como su crédito se está empezando a agotar
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El Liverpool, vigente campeón de la Premier League y uno de los mejores equipos de Europa en lo que a nivel de plantilla se refiere, está viviendo uno de los momentos más complejos de su historia y en Anfield han activado el estado de alarma.
No es para menos. Después de un año positivo para la parroquia red, las cosas se han complicado sobremanera y, en estos momentos, nadie sabe hasta dónde puede llegar esta crisis. Las sensaciones no son nada buenas y, como siempre pasa en el fútbol, todas las críticas están yendo dirigidas a Arne Slot, el líder del proyecto y la cabeza visible de un equipo que no está encontrando la forma de salir del espiral en el que se han metido.
El Liverpool ha perdido nueve de sus últimos 12 partidos. Todo empezó el 27 de septiembre. Aquel día, el equipo de Anfield cayó derrotado ante el Crystal Palace, vigente campeón de la FA Cup, en Selhurst Park, y ese partido perdido lo hizo mucho daño al equipo de Arne Slot.
Pero el problema es que lo que vino después fue aún peor. El Liverpool acumuló tres derrotas consecutivas (Galatasaray, Chelsea y Manchester United) y el neerlandés empezó a perder crédito como técnico del Liverpool. Su puesto corría peligro y el jefe del banquillo red argumentó que el equipo seguía estando en construcción. Y eso le costó más derrotas ante Brentford, Crystal Palace (EFL Cup), Manchester City, Nottingham Forest y PSV. Las únicas victorias fueron ante Aston Villa, Real Madrid y Eintracht Frankfurt.
Razón no le faltaba a Slot. En el mercado de verano, el Liverpool se gastó 450 millones de libras en fichajes para tratar de dar continuidad a lo conseguido el año pasado. A Anfield llegaron futbolistas como Alexander Isak (145), Hugo Ekitiké (95), Florian Wirtz (125), Milos Kerkez (46,9), Jeremie Frimpong (40) y Giovanni Leoni (31) para potenciar el nivel del equipo, pero el tiempo se ha encargado de demostrar que el dinero no lo es todo en el fútbol actual.
De nada sirve gastarse una millonada en jugadores diferenciales si la estructura general no es sólida. Y esa es una de las causas de este bajón inesperado del Liverpool. La otra ha sido el inesperado fallecimiento de Diogo Jota el verano pasado. El portugués era uno de los tipos más queridos del vestuario y su ausencia ha afectado a una plantilla que está echando mucho de menos al '20', el dorsal que ha sido retirado por parte del conjunto inglés para honrar su memoria.
La preocupación en Anfield es máxima y la continuidad de Arne Slot en el banquillo corre peligro. Sin embargo, el técnico mantiene la fe y está convencido de que esa mala racha acabará pronto. «Si cualquier entrenador del mundo pierde partidos de fútbol, y muchos más como los que hemos perdido nosotros, es bastante normal que la gente tenga una opinión al respecto. Intento analizar y ayudar a los jugadores tanto como puedo, y es obvio que no lo hago como lo hice la temporada pasada. Tengo que hacerlo mejor y eso es lo que intento cada día».
No obstante, el que no lo tiene tan claro es Steven Gerrard, leyenda del Liverpool. «Crisis es una palabra muy fuerte y poco respetuosa con algunos de los jugadores que han dado lo mejor de sí mismos por este club de fútbol, y con el entrenador que lo dio todo hace tres meses. Si hubieran pasado seis meses, o un año, y estuviéramos más lejos de ese éxito, tal vez se podría usar esa palabra. Pero no se puede negar que el equipo está pasando por grandes dificultades, está en una racha terrible, la confianza está por los suelos y sigue desangrándose. A menos que los entrenadores encuentren respuestas y estabilidad en el equipo, esto va a continuar».
Las aguas bajan revueltas en Anfield y la preocupación en el seno de la parroquia red es máxima. En la Premier ya ha bajado hasta la 11ª posición (a 11 puntos del liderato) y en la Champions va decimotercero a falta de tres partidos para el final de la fase liga. El Liverpool está en caída libre.