El VAR se lava las manos en el polémico gol con el que empató el Manchester City

Pintaba bien el partido para el Real Madrid gracias al gol de Rodrygo Goes en el minuto 27. El equipo de Xabi Alonso se adelantó ante el Manchester City y estaba siendo claro dominador del encuentro, pero en la primera que tuvieron los hombres de Pep Guardiola pusieron las tablas en una jugada donde los blancos protestaron ante Clement Turpin, árbitro del encuentro.

La igualada llegó en un córner que logró rematar Gvardiol ante Bellingham, pero fue repelido por Courtois. El balón quedó muerto en el área pequeña y lo aprovechó un atento O´Reilly, que fue el más listo de la clase y la empujó al fondo de la portería. Hasta ahí todo legal, pero los distintos forcejeos que hubo en el área hicieron que el Real Madrid reclamara la actuación del VAR, sobre todo por una posible falta a Antonio Rüdiger, que se quedó tendido sobre el césped.

La acción en concreto sucedió con Ruben Dias, que forcejeó con el defensor alemán en el área pequeña y lo dejó fuera de combate. Habrá debate sobre si es suficiente para pitar o no falta en ataque y si debió intervenir el VAR. Así lo entendió el Real Madrid, pero el gol terminó subiendo al marcador sin que el colegiado francés acudiera al monitor. Valió el tanto y solo siete minutos de verse por debajo el City empató de nuevo.

Además de esa falta a Rüdiger, los jugadores del Real Madrid también protestaron una posible falta de Bernardo Silva sobre Thibaut Courtois. El portugués agarró al guardameta belga lo suficiente para que no pudiese salir cómodo a por el balón, pero la tecnología tampoco apreció ahí nada punible. Esta infracción sí parece más clara, puesto que solo el luso agarra al portero y no son los dos en un forcejeo, pero tampoco mereció una segunda revisión.

Así pues, se dio por válido el gol pese a la indignación del Santiago Bernabéu, que vio dos faltas en una misma acción y ninguna señalada.