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06 de mayo de 2024

El Real Madrid ha ganado a Osasuna 2-4

El Real Madrid ha ganado a Osasuna 2-4EFE

Osasuna 2-4 Real Madrid

El Real Madrid exhibe su pegada y conquista El Sadar con una goleada para enmarcar

El equipo de Ancelotti firma un partido perfecto en el que no le dio ni una sola opción a los rojillos y consiguen un nuevo triunfo a domicilio

El Real Madrid es líder de esta Liga por algo. Y este sábado lo ha vuelto a demostrar. Después del 4-0 de la semana pasada ante el Celta en el Bernabéu, el equipo Ancelotti ha vuelto a demostrar este sábado que tiene pegada y que de aquí a final de temporada va a pinchar muy poco, por no decir nada. Los de Ancelotti firmaron un partido perfecto en el que no le dio ni una sola opción a los rojillos y han demostrado que están a años luz de sus perseguidores más directos (2-4).
Visitar El Sadar es sinónimo de un dolor de muelas. El templo rojillo se caracteriza por ser uno de esos estadios en los que la afición aprieta mucho. Y eso es algo el Madrid siempre ha comprobado las veces que le ha tocado viajar a Pamplona. Y este sábado, El Sadar presentó un ambiente magnífico. No era para menos. Cuando el conjunto blanco visita la Comunidad Foral de Navarra es, sin duda alguna, el partido del año para Osasuna.
El inicio tuvo mucho que ver con la energía que se vivía en las gradas. El Madrid golpeó primero y Vinicius aprovechó un error en salida de balón de la zaga osasunista para regatear a Sergio Herrera y celebrar el primer gol de la tarde. Gran comienzo del equipo de Ancelotti. Sin embargo, la alegría le duró poco al Real Madrid. Tres minutos después, Osasuna reaccionó rápido y en el 7', Budimir provocó el delirio de El Sadar. El ariete croata aprovechó un buen pase al área de Jorge Herrando para poner las tablas en el marcador.
El gol le dio ánimos a Osasuna. Los de Jagoba Arrasate se fueron a por el Madrid y enlazaron un par de jugadas que encandilaron a la afición rojilla que se empezó a creer que era posible ganar al equipo madridista. Lo que pasa es que el Madrid es mucho Madrid y sabe sufrir para, minutos más tarde, pegar un nuevo hachazo. Fede Valverde colgó un balón al área y allí apareció Dani Carvajal para definir de forma fantástica y poner el 1-2.
Con el paso de los minutos, se empezó a ver un gran partido de fútbol. El Madrid atacaba y tenía controlado todo lo que pasaba a su alrededor. Mientras tanto, Osasuna buscaba el gol del 2-2 que le permitiera irse al descanso con un sabor de boca agradable. Pero el problema es que el conjunto rojillo no estaba siendo capaz de desactivar las transiciones del Madrid que es, sin duda, el gran fuerte de los blancos. En definitiva, pintaba bien la tarde para el Real Madrid. La nota negativa fue la tarjeta amarilla que le mostró Martínez Munuera a Vinicius por protestar, lo que significa que el ariete brasileño se perderá el próximo partido contra el Athletic por acumulación de tarjetas.
Ante Budimir pelea un balón con los futbolistas del Real Madrid

Ante Budimir pelea un balón con los futbolistas del Real MadridEFE

Tras el paso por vestuarios, se vio a un Real Madrid vigoroso. Los de Ancelotti sabían que el 1-2 era un resultado algo corto y necesitaban sentenciar el encuentro cuanto antes para evitar sustos innecesarios. Y al principio del segundo acto, el Madrid gozó de un par de llegadas para firmar la sentencia.
Después de esas 'ocasiones' madridistas, el partido bajó de temperatura y se dejó de ver ese fútbol vertical que sí se vislumbró en el primer acto. El Madrid sabía que el duelo no estaba cerrado del todo y era consciente de que si dejaba a Osasuna coger velocidad... iba a sufrir mucho. Los muchachos de Carletto necesitaban ese tercer gol como el comer.
Y este es precisamente el éxito del Real Madrid este año. Saber sufrir y cuando se presente una oportunidad... matar el encuentro. El encargado de poner el 1-3 en el luminoso fue Brahim, el futbolista del que más se hablado esta semana debido a su decisión de jugar con Marruecos. El '21' se quedó sólo ante el peligro y definió de maravilla para batir a Sergio Herrera. Y tan solo tres minutos después, en el 63', Vinicius sacó su magia y definió con sutileza y una precisión de cirujano para poner el 1-4 y cerrar definitivamente el encuentro. Una definición de auténtico crack.
En tan solo 180 segundos, el Madrid se encargó de sentenciar un encuentro que se le podía haber complicado mucho si no llega a despertar. Osasuna tiró el partido por la borda y Arrasate decidió hacer cambios para dar descanso a sus jugadores titulares.
Vinicius intenta irse de Jon Moncayola y Lucas Torró

Vinicius intenta irse de Jon Moncayola y Lucas TorróAFP

Con el duelo perdido, Osasuna optó por jugar a la altura de la divisoria. Y el Madrid aprovechó esos espacios para ganar metros en ataque y seguir atacando en busca de más goles. El conjunto madridista estaba firmando una auténtica exhibición en tierras navarras. El Madrid necesitaba un partido así lejos del Bernabéu para demostrar que está a años luz de sus perseguidores más directos. Antes del final del encuentro llegó el 2-4 de Osasuna, pero el partido ya estaba cerrado. Nueva victoria del Madrid y encara el parón de selecciones como líder de la Liga.

Ficha técnica

Osasuna 2: Sergio Herrera; Unai García, Catena (Iker Muñoz, 69'), Herrando (Juan Cruz, 79'); Areso, Moncayola, Torró, Moi Gómez (Pablo Ibáñez, 69'), Mojica; Budimir (Raúl García, 70') y Arnaiz (Rubén García, 69').

​Real Madrid 4: Lunin; Carvajal, Tchouaméni, Rüdiger, Mendy (Fran García, 84'); Valverde, Camavinga (Nacho, 72'), Kroos (Lucas Vázquez, 77'); Brahim (Luka Modric, 72'), Rodrygo, Vinicius (Arda Güler, 84')

​Goles:
0-1 Vinicius (4'); 1-1 Budimir (7'); 1-2 Carvajal (18'); 1-3 Brahim (61'); 1-4 Vinicius (64'); 2-4 Iker Muñoz (91')

​Árbitro: Martínez Munuera (comité valenciano). Amonestó a los locales Herrando (31'), Lucas Torró (55'), Unai García (63') y a los visitantes Vinicius (44'), Camavinga (53')

​Estadio: El Sadar (Pamplona). 22.430 espectadores
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