Xabi Alonso examina el futuro de la plantilla del Real Madrid en el Mundial de Clubes

Xabi Alonso había pedido la continuidad de Modric. El croata no se marcha porque no rinda. Al revés. Ha sido uno de los mejores futbolistas de la temporada y se despedirá como director de juego en el Mundial de Clubes y de la mano de su compañero Xabi Alonso, con el que compartió dos años en el césped.

Pero en septiembre cumple los cuarenta, colgará las botas con Croacia en catorce meses y su permanencia en el equipo un año más frenaría las oportunidades de Güler y Nico Paz, quien volverá a casa si se abonan ocho millones al Como. Luka no era un hombre para el futuro y Xabi Alonso lidera una nueva etapa que significará una transformación total del Real Madrid.

El club madrileño vivirá tal revolución que por primera vez en sus dos siglos de historia la plantilla blanca comienza la nueva temporada en mayo, dentro de unas horas, bajo la batuta del entrenador guipuzcoano.

El primer objetivo de la nueva campaña es el Mundial de Clubes, que nace el catorce de junio y finaliza el trece de julio. La gran competición ideada por la FIFA no será el final de curso sino el principio del siguiente. Prueba de ello es que el Real Madrid ya ha acometido tres importantes fichajes para disputarlo: Trent Alexander-Arnold, Dean Huijsen y Álvaro Carreras. Y prepara la contratación de un cuarto hombre, Nicolás Paz. En la misma dirección, busca un centrocampista que tome el timón.

El Mundial de Clubes estrena la nueva temporada y es el gran reto

El preparador vasco adelanta su llegada al Bernabéu porque hay un gran reto enfrente. Se le prometieron refuerzos y se han hecho tres incorporaciones defensivas para suplir la plaga de lesiones en la retaguardia. Álvaro Carreras es cuestión de días. Dos centrocampistas están en camino.

Gianni Infantino sabe que el Real Madrid quiere conquistar el primer gran Mundial de Clubes de la historia. El Manchester City, el Chelsea, el Inter, el Bayern, el Atlético, el Benfica y el PSG son los otros candidatos al mejor título internacional de equipos. Infantino sabe que todos estos grandes elevarán el prestigio del torneo al primer nivel mundial.

Y Xabi Alonso quiere empezar ganando la competición internacional más grande del planeta, con escuadras de los cinco continentes. La advertencia colateral a esa ambición ilimitada que enmarca la filosofía del Real Madrid es que muchos integrantes de la plantilla madridista saben que se juegan su futuro en este soberbio envite, pues han suspendido a lo largo de la temporada que acaba de cerrarse.

La valoración interna de la dirección deportiva

El análisis interno de la dirección deportiva madridista es muy objetivo. Mbappé ha obtenido el Pichichi y la Bota de Oro en una temporada gris del plantel, 43 goles en total y 31 en Liga, datos que indican el alto nivel del futbolista y la enorme exigencia del Real Madrid. El francés ha hecho una buena campaña y aspira a transformarla en sobresaliente si obtiene el Mundial de Clubes o si brilla en su devenir y se convierte en el máximo goleador del torneo.

Kylian ha sido el mejor jugador del Real Madrid junto al rendimiento de Valverde, Tchouaméni, Modric y Asencio. En un segundo escalón, Courtois, Fran García y Rüdiger, lastrado al final por una larga lesión, obtuvieron el aprobado. El resto de futbolistas no estuvo al nivel necesario, muchos de ellos afectados por dolencias y recuperaciones. Todos saben que se examinan en Estados Unidos, pues el Mundial de Clubes es el examen final y hay varios hombres que no tienen asegurada su continuidad.

Courtois merece capítulo aparte: funcionó bien en líneas generales, pero no estuvo fino ni eficaz en momentos clave, en jugadas en las que hace falta el milagro del guardameta que tantas veces salvó al conjunto. Ahora renovará, al igual que Rüdiger y Vinicius, pero los tres saben que deberán mejorar sus prestaciones porque Alonso viene para aplicar una competencia interna feroz que obtenga mayor eficiencia del grupo. El que avisa no es traidor.

Todos los demás se examinan en el Mundial de Clubes

Llega un nuevo preparador y todos están alerta porque ya no tienen el puesto asegurado. La permanencia de un técnico durante cuatro años implica que el futbolista que obtiene la titularidad se acomoda porque conoce bien a su jefe. Ahora ya no hay nada fijo. Muchos no han sacado un aprobado en el curso. La mayoría sabe que no aprobaron. Toca dar el do de pecho en Estados Unidos. Y Xabi tiene asumido que para traer a un gran centrocampista hay que vender.

Mbappé es el epicentro y Vinicius debe conjuntarse con el Pichichi

El guipuzcoano jugará con dos puntas y sus pupilos ya saben que Mbappé será el líder de toda la estrategia de ataque. La premisa argumental es sencilla. Si tienes un delantero que en una temporada normal marca 43 goles y todavía falta el Mundial de Clubes hay que explotar esa gran virtud de este jugador. El reto de Alonso es ensayar técnicamente jugadas y desmarques de Vinicius y de Kylian para sacar el máximo provecho de dos estrellas del planeta balompédico.

El aviso interno será directo: Mbappé es el líder del fútbol del Real Madrid y a quien no le guste tendrá que irse. Vinicius deberá complementar su talento con el francés. Es el mejor extremo izquierda del mundo jugando con la pierna derecha y su velocidad para llegar al área y desbordar rivales debe rematarla con pases al mejor artillero del planeta. En la misma medida, Mbappé dará pases de gol a Vinicius cuando esté mejor colgado. Deben exprimir lo mejor de ambos mutuamente.

Vender para poder fichar a un gran centrocampista

Hemos dicho que para fichar el director de fútbol que Xabi pretende hay que vender. Seamos francos: la adquisición de Álvaro Carreras hace que sobren Mendy o Fran García, porque habrá tres laterales zurdos. En el mismo sentido, el aterrizaje de Huijsen, que mide dos metros, supone que Alaba, que acumula lesiones, tenga muy difícil jugar, pues Dean, Asencio, Rüdiger, Tchouaméni e incluso Militao estarán por delante. Militao también sale de la triada y se examinará con Alonso.

Hay más mercado. La dirección deportiva cuenta con Ceballos, pero sí tiene una buena oferta no se le impedirá marcharse. Lo mismo sucede con Rodrygo. Xabi hablará con todos individualmente durante estos días y se aclararán muchas posiciones. El Real Madrid comienza la nueva temporada un día después de acabar la anterior, con el objetivo de ganar el título más importante del año en julio. Los jugadores que no van con las selecciones harán una minipretemporada y trabajos técnicos con Alonso. El balón no deja de rodar en el Real Madrid. Hay que ganar desde julio (Mundial de Clubes) a mayo (la Champions). Eso es ambición.