Joan García, durante la primera jornada de LaLiga en el Mallorca - Barcelona
Lo que el Barça trata de ocultar de las inscripciones de Joan García y Rashford
La junta directiva de Joan Laporta ha llevado a cabo numerosos recortes en el resto de secciones para evitar sustos en el equipo de fútbol
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Justo a tiempo consiguió el FC Barcelona inscribir a sus dos grandes fichajes en este mercado: Joan García y Marcus Rashford. La gran prioridad era hacer hueco al guardameta catalán porque únicamente estaba disponible Iñaki Peña (un descarte para esta temporada) en caso de que la junta directiva de Joan Laporta no tuviese el visto bueno de LaLiga para contar con su nuevo portero en el estreno liguero ante el Mallorca.
«Confío en el club», dijo Hansi Flick en la rueda de prensa previa al duelo tras antes haber mostrado su enfado por estar en esta situación. Le dieron lo que pidió y pudo contar con los dos jugadores que pidió. Ahora, espera que Wojciech Szczesny y Gerard Martín puedan estar en la siguiente jornada, frente al Levante en el Ciutat de Valencia, pues recordemos que por las obras del Camp Nou el Barça jugará de visitante las tres primeras jornadas.
Hay total convencimiento en los despachos del club azulgrana de que llegarán a tiempo para inscribir a estos dos futbolistas y consideran que la clave está en dar salida a Iñaki Peña y Oriol Romeu, dos futbolistas con los que Flick no cuenta para nada y a los que se les busca destino, al primero en forma de cesión y al segundo de manera definitiva. De hecho, incluso se le ha ofrecido la carta libertad si perdona parte de la ficha.
Si logran todo esto se podría decir que la dirección deportiva, encabezada por Deco aunque con la supervisión constante de Laporta, habría hecho su trabajo. Ahora bien, hay una parte que el Barcelona trata de ocultar pero que a poco que se indague es más que evidente. Y es que el Barça, más allá de haber utilizado el 80 % del salario de Ter Stegen para contar con Joan García, también ha tirado de avales, palancas y recortes en el resto de secciones que pueden pasar factura a largo plazo.
Constantes jugadas financieras
A Marcus Rashford el Barça ha logrado inscribirle gracias a ese famoso aval de 7 millones de euros. Xavi O’Callaghan, mítico jugador del Barça de balonmano y actual responsable de las secciones profesionales del club, ofreció una explicación sobre el porqué de esta desviación presupuestaria. En teoría, ninguna sección salvo la de balonmano ha tenido desviaciones y todo se debe a la diferencia entre masa salarial inscribible y no inscribible.
La inscribible se trata de la la plantilla del primer equipo azulgrana además del cuerpo técnico, donde el Barça solo tiene inscritos a Flick y a Marcus Sorg, por lo que el resto del equipo es masa salarial no inscribible. De ahí es de donde viene la desviación, ya sea del primer equipo o de las categorías inferiores. Esa masa salarial no inscribible es la que ha recibido el aval de 7 millones de euros para actuar como garantía y que no se lo quitaran de la masa salarial inscribible del primer equipo, lo único que preocupa a Laporta en estos momentos.
El director de las secciones profesionales del FC Barcelona, durante su comparecencia en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva Joan Gamper
Pese a las explicaciones de Xavi O’Callaghan, que ha asegurado que el resto de secciones del club contarán con un presupuesto de 56 millones de euros distribuido en 28,75 para el baloncesto –que recorta la inversión en 2,75 millones–, 13,75 para el fútbol femenino, 7,5 para el balonmano, 4 para el fútbol sala y 2 para el hockey sobre patines, la realidad es que todos los equipos han dado un paso atrás en cuanto a calidad.
Lo más evidente es en el fútbol femenino, la sección más exitosa en lo deportivo y la única que genera beneficios en lo económico, donde han salido grandes jugadoras de la segunda unidad como Jana Fernández, Ingrid Engen, Fridolina Rolfö, Ellie Roebuck, Bruna Vilamala y Martina Fernández y han optado por dejar la plantilla en solo 18 jugadoras. Una cifra muy baja y que podría suponer un problema. Además, jugadoras como Mapi León, Ona Batlle, Alexia Putellas, Salma Paralluelo, Claudia Pina, Caroline Graham Hansen o Cata Coll terminan contrato en 2026 y está por ver si podrán ser renovadas.
Salvar al equipo masculino
Así pues, Laporta ha tomado la decisión de desmantelar el resto de secciones para salvar al equipo masculino y con el paso de los años van perdiendo calidad. Lo más evidente es el Barça Basket, que lleva años sin ganar nada y ha pasado de ser un coloso europeo a no ser siquiera la alternativa al Real Madrid en España, pues ese lugar lo ocupa ahora Unicaja. Laporta sigue salvando bolas de partido en fútbol, pero el Més que un club se le cae a pedazos y necesita cuanto antes el regreso al Camp Nou para recibir un espaldarazo financiero. Las elecciones son en 2026.