El Real Madrid evita la tragedia en Mendizorroza y da oxígeno a Xabi Alonso

Sin brillo y con mucho sufrimiento. Así logró el Real Madrid vencer en Mendizorroza al Deportivo Alavés en un partido en el que por momentos se mascó la tragedia. Primero Mbappé, luego Courtois y después una genialidad entre Vinicius y Rodrygo valieron un triunfo por 1-2 que por momentos pareció muy lejano. Se salva por ahora Xabi Alonso, pero la imagen volvió a ser pobre, de un equipo que no encuentra su juego.

Era ese el menor de los problemas para el técnico tolosarra en la noche de este domingo, donde lo único que importaba era ganar, salvar el puesto y ponerse a cuatro puntos del FC Barcelona. Cumplió con ese objetivo y respiró aliviado, consciente de que cualquier resultado que no fuese la victoria habría provocado su cese.

Llegó el Real Madrid a Mendizorroza con un carrusel de bajas y fue empezar el partido y todos los ojos estaban puestos sobre Mbappé. Ni cinco minutos habían pasado y ya se le veía cojear sobre el césped. Un golpe con Ibáñez le hizo llevarse la mano a la rodilla derecha, aunque hasta tocado tuvo una oportunidad para adelantar a los suyos con un zurdazo de volea que se marchó desviado.

Se veía incómodo al delantero de Bondy, pero sin querer abandonar el terreno de juego, pues no se planteaba dejar a los suyos en un momento tan delicado tanto para el equipo como para Xabi Alonso, obligado a ganar para seguir en el cargo. Eran evidentes sus molestias, pero incluso así tuvo otra oportunidad con un disparo con la derecha que se marchó por poco. Lo intentaba el Madrid, aunque más a chispazos que con buen juego.

Mbappé siempre aparece

Merodeaba la portería de Sivera el equipo blanco y Rodrygo se animó con una jugada idéntica a la de su gol ante el Manchester City el pasado miércoles, pero esta vez su tiro cruzado se marchó fuera. No lo encontraba el Real Madrid en estático y fue gracias a una contra cuando logró el premio del gol. Recuperó Asencio con maestría, cedió el balón a Bellingham y el inglés se la dio a Mbappé para que inventara. Aceptó el reto el francés, que se internó en el área y sacó un disparo a la escuadra.

Un minuto después se anuló un gol a Bellingham por ayudarse de la mano justo antes del disparo. Fue la última ocasión del Real Madrid en la primera mitad porque nada más hacer el gol se echó para atrás y cedió la iniciativa al Alavés en los últimos 15 minutos. Casi lo paga caro porque en la última acción antes del descanso Ibáñez tuvo un disparo a bocajarro que salvó Courtois con la cara. Misma historia de siempre, Courtois y Mbappé sosteniendo al Madrid.

Con la misma actitud que al final de la primera mitad se presentó el Real Madrid a la reanudación. Había más miedo por perder la ventaja lograda que interés en irse a por el segundo. Aun así, en un nuevo contragolpe, Mbappé y Vinicius tuvieron la oportunidad de dar la tranquilidad a los suyos. Primero salvó Sivera un zurdazo del galo y el rebote lo cogió el brasileño, que buscó un disparo a la escuadra que encontró la respuesta del guardameta babazorro.

Envidó tras esto Coudet con un doble cambio que le terminó saliendo a la perfección. Metió a Toni Martínez y Carlos Vicente, y tan solo un minuto después el segundo se plantó solo frente a Courtois tras hacer un control exquisito de un pase en largo de Antonio Blanco y definir a la perfección frente al belga. Se anuló por fuera de juego de primeras, pero Rüdiger lo rompía y el VAR terminó dándole validez. Contra las cuerdas el Real Madrid y Xabi Alonso.

Apareció el mejor Vinicius

Mascó la tragedia el Real Madrid y sobre todo Xabi Alonso. Olía a un nuevo pinchazo y además el Deportivo Alavés se envalentonó hasta el punto de que Toni Martínez tuvo el segundo en sus botas. Fue la picardía de Asencio con un ligero empujón el que lo evitó y dio una vida extra a los blancos.

La aprovecharon a la perfección Vinicius y Rodrygo. Se inventó el primero de ellos una cabalgada imposible ganándole la carrera a Jonny Otto para después darle el pase de la muerte al '11' y que este la empujara a placer y lo celebrara con rabia. Festejó como el que más Xabi Alonso, consciente de que este gol le sirvió para salvar su primer match ball.

Tuvo que sufrir todavía porque ni García Verdura en el campo ni González Fuertes en el VAR apreciaron un claro penalti sobre Vinicius. No se lo creía el Real Madrid, que no pudo sentenciar y le tocó aguantar el 1-2 hasta el pitido final. Un triunfo que sabe a más que tres puntos.