Alcaraz hace bueno su lema y se mete en cuartos de Roma tras superar una batalla de gladiadores

Carlos Alcaraz ya está en los cuartos de final del Masters 1000 de Roma y lo hizo tirando de cabeza, corazón y cojones, el lema al que siempre ha sido fiel en estos siete años como tenista profesional. El murciano salió victorioso en un partido épico (6-3, 3-6 y 7-5) y se clasificó para la antepenúltima ronda del torneo italiano, donde esperará el británico Jack Draper.

La hora (11.00) no era la mejor, pero aún así el Campo Centrale del recinto romano presentó una buena entrada para ver uno de esos típicos partidos de Masters 1000. El duelo enfrentaba al cabeza de serie número tres del torneo contra el 23º y el espectáculo estaba garantizado.

Khachanov arrancó francamente bien el duelo. El tenista de Moscú salió convencido de que podía dar la campanada y en un abrir y cerrar de ojos se puso 1-3 en el marcador. Carlitos entró al partido algo frío y el moscovita aprovechó esa situación para dejarle claro al murciano que el duelo no iba a ser un paseo triunfal.

Esa situación adversa hizo reaccionar a Carlitos. El tenista de El Palmar se puso manos a la obra y sin hacer mucho ruido logró darle la vuelta al marcador. El número tres del mundo se puso 4-3 arriba, al ruso le entraron las dudas que no mostró al inicio del duelo y cuando se dio cuenta de la situación ya había perdido el primer set por 6-3.

Remontada de campeón por parte de Carlitos Alcaraz y un pasito más cerca de los cuartos de final del Masters 1000 de Roma, un torneo en el que su mejor resultado había sido la tercera ronda ante el húngaro Fabian Marozsan en el año 2023 y en el que la suerte nunca se puso de su lado.

De la alegría a la enésima desconexión

El «vamos» que gritó Carlitos fue estruendoso. El murciano sabía que estaba en juego el poder llegar a Roland Garros como segundo cabeza de serie y ese rugido de guerra se puso escuchar hasta en el barrio del Trastévere, una de las zonas más bohemias, originales y coloridas de la ciudad de Roma en la que está ubicado el majestuoso e icónico Castillo de Sant'Angelo.

Ese primer set le dio alas al tenista murciano y los compases iniciales del segundo parcial fueron totalmente distintos. Hubo más igualdad y tanto Alcaraz como Khachanov contribuyeron al espectáculo. El de El Palmar estaba muy cómodo sobre la tierra batida del Campo Centrale y con 2-2 en el marcador dio el primer estacazo del segundo set.

El español sabía que romper cuanto antes le iba a permitir afrontar la recta final del duelo con mayor tranquilidad y sin tanta presión y confirmó la rotura con un derechazo al fondo de la pista que acabó limpiando la línea. El drive le estaba corriendo de maravilla al pupilo de Juan Carlos Ferrero y cuando eso pasa los rivales saben que lo peor está por llegar.

Sin embargo, la alegría le duró poco a Alcaraz. El murciano no logró afianzar el break y al juego siguiente Khachanov se lo devolvió. El partido volvía a la igualdad inicial del segundo set y el ruso empezó a creer en sus posibilidades. El duelo no estaba para nada cerrado. El de Moscú afianzó el quiebre y llevó el partido al tercer set. 6-3 para él.

Tenis en su máxima expresión

Llevar el partido al tercer parcial no entraba en los planes de Carlitos Alcaraz. Nunca es del todo positivo acumular más tiempo del deseado en pista pensando en el desgaste físico, pero al murciano no le quedaba más remedio si quería incluir su nombre en la nómina de cuartofinalistas del Masters 1000 de Roma.

Pero para estar en la antepenúltima ronda del torneo italiano, Carlitos Alcaraz iba a tener que exprimirse al máximo y eso fue lo que hizo. Cambió el chip, se puso manos a la obra y volvió a sacar su mejor tenis para dejar fuera de juego a Khachanov.

No obstante, el tenista moscovita no dio su brazo a torcer y le vino a decir a Alcaraz que se tenía que ganar su puesto en los cuartos de final del torneo. El ruso estaba cuajando un gran partido e iba a seguir así hasta que le fallaran las fuerzas, algo que llegó en la recta final del set. Alcaraz llegó mejor al punto álgido del duelo y le puso su firma al tercer set con un 7-5 de lo más sufrido. Próxima parada: Jack Draper.