Estas son las enfermedades con las que es más probable cobrar una pensión de incapacidad permanente

Según los últimos datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social, las pensiones por incapacidad permanente en España son las terceras pensiones contributivas más numerosas del sistema, tras las de jubilación y las de viudedad.

La Seguridad Social define la incapacidad permanente como la situación en la que «un trabajador ve reducida o anulada su capacidad laboral por enfermedad o accidente». Un tribunal médico será el encargado de examinar al trabajador y determinar si su incapacidad permanente es parcial, total, absoluta o de gran invalidez. El dinero que el afectado recibirá varía en cada caso, ya que para calcular la pensión se toma como referencia la base reguladora de las últimas 24 mensualidades.

Pero, ¿qué enfermedades o accidentes pueden hacer que se le conceda a una persona la incapacidad permanente?

Enfermedades para incapacidad permanente

Actualmente no existe un listado oficial que deje claro qué enfermedades dan derecho a una pensión por incapacidad permanente. Y la razón es muy simple: una enfermedad o accidente no tiene por qué afectar de la misma manera a todas las personas por igual y no repercute del mismo modo en todos los trabajos. Es decir, una parálisis en una pierna no afectará del mismo modo a un obrero que a una persona que trabaja en una oficina sentado frente a un ordenador.

Sin embargo, existen diferentes entidades, asociaciones y especialistas que elaboran listas con aquellas enfermedades con las que tradicionalmente se han concedido un mayor número de pensiones por incapacidad permanente.

Estas listas son de carácter totalmente orientativo y solo un tribunal médico podrá avalar si aquella persona que la padece puede o no percibir una pensión de este tipo.

Una de las listas más difundida por los medios de comunicación es la del bufete Camomany Abogados, especializado en esta materia: