Pere Aragonès junto a Pedro Sánchez
Aragonès destapa en una visita a Madrid que su objetivo final es cortar toda aportación de Cataluña al Estado
ERC insiste en que existe un supuesto «expolio fiscal» mientras el Gobierno reconoce que nunca se le había dado tanto a Cataluña
El Gobierno admite que ha regado a Cataluña con más recursos que nunca en plena ofensiva de la Generalitat para hacerse con todos los impuestos. Y, pese a ello, ERC insiste en cortar con la solidaridad común amparándose en un supuesto «expolio fiscal» a Cataluña, como ha reconocido el propio presidente catalán, Pere Aragonès.
Apenas un día después de que la Generalitat presentara una propuesta para gestionar el 100 % de los impuestos que se recaudan en Cataluña, frente al 9 % actual, a cambio de una cuota de solidaridad interterritorial, Aragonès ha precisado, durante un desayuno informativo de Europa Press en Madrid, que esta aportación sería «temporal» mientras el Estado «adelgaza» su estructura para acomodarse a la llegada de un menor número de recursos.
Aragonès ha explicado que la contribución que realizará Cataluña al fondo de solidaridad interterritorial será «fijada bilateralmente» con el Gobierno central, «sometida a unos objetivos y limitada en el tiempo». En cuanto a los objetivos a cumplir, ha aclarado que estarían «relacionados con el grado de desarrollo económico, con el objetivo de aumentar la capacidad fiscal de todos los territorios y relacionados con los objetivos de consolidación de las cuentas públicas».
Mientras Aragonès se pronunciaba así, a pocos metros, en el Congreso de los Diputados, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero reconocía que la comunidad autónoma «nunca tuvo más recursos que de la mano del Gobierno progresista». Montero ha asegurado que el Estado ha destinado un 50 % más de financiación a Cataluña desde que Pedro Sánchez llegó a la presidencia del Gobierno, hace cinco años. El resultado es que la Generalitat recibe ahora 50.000 millones más a los que gestionaba durante el Gobierno de Mariano Rajoy.
Un trato de favor que no ha servido para calmar a los partidos secesionistas, como ha quedado patente en el mismo Congreso, tras insistir la portavoz adjunta de ERC en el Congreso, Teresa Jordà, en que existe un «expolio fiscal» a Cataluña en favor del resto del país.
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