Fachada de la sede de BBVA en Madrid.
El BBVA no descarta renunciar a la opa sobre el Sabadell y pone en revisión las sinergias de la operación
La compañía presidida por Carlos Torres constata que las condiciones del Ejecutivo «pueden derivar en un proceso de integración complejo con un mayor consumo de tiempo y recursos del inicialmente previsto»
BBVA pone en revisión las sinergias de la opa al Sabadell y se plantea incluso renunciar a la operación. El banco traslada está información tras la venta de TSB, aprobada este miércoles por la junta de accionistas de Sabadell, y las draconianas condiciones impuestas por el Ejecutivo que impiden de manera efectiva la fusión durante un periodo de entre tres y cinco años.
La compañía presidida por Carlos Torres asegura en una comunicación remitida a la CNMV que siguen teniendo interés en la operación y que tienen «intención» de llevarla a cabo «tan pronto como sea posible», aunque admite que han aflorado condiciones negativas que tienen que tener en cuenta antes de tomar una decisión definitiva.
El banco ha emitido esta actualización a través de un suplemento al folleto universal, una información que ha registrado este jueves en la CNMV.
En dicho documento, el banco ya no incluye las sinergias de 850 millones que estimaba de inicio. No obstante, fuentes del banco aclaran que las sinergias «en ningún caso serán inferiores».
Además, el documento recoge que «si no se obtienen alguna de las aprobaciones societarias o la autorización del Ministro de Economía, Comercio y Empresa, la fusión no se llevará a cabo».
«En este caso, es posible que resultase más difícil integrar las operaciones de BBVA y Banco Sabadell, pudiendo derivar en un proceso de integración complejo con un mayor consumo de tiempo y recursos del inicialmente previsto. Ello, a su vez, podría dificultar también en mayor medida el poder alcanzar ahorros de costes y otras eficiencias operativas. En el caso de que la fusión no se completara por cualquier motivo, podría dar lugar a la imposibilidad de materializar gran parte de los beneficios esperados de la oferta, incluidos los ahorros de costes y otras eficiencias operativas», señala el documento.
A pesar de ello la entidad aclara que «BBVA tiene intención de promover la fusión cuando la condición del Consejo de Ministros deje de estar en vigor».
Sabadell premia al accionista que no acuda al canje
Los accionistas de Sabadell dieron luz verde este miércoles a la venta de la filial británica por una cantidad de hasta 3.641 millones de euros.
La venta, aprobada sin ningún voto en contra, permitirá a Sabadell repartir un beneficio extraordinario récord entre los accionistas cuando se materialice, a lo largo del primer trimestre de 2026, siempre que no respalden la operación de BBVA.
Con el capital generado, el banco abonará un dividendo extraordinario en efectivo de 50 céntimos de euro por acción, equivalente a unos 2.500 millones de euros. Este importe se suma a los 1.300 millones de euros que estima repartir con cargo a los resultados de 2025.
El dividendo extraordinario «no se podrá cobrar por quienes acudan al canje (de acciones propuesto por BBVA) pero sí por quienes no hayan acudido», ha enfatizado Oliu en la segunda junta de accionistas celebrada este miércoles. No está previsto que BBVA tenga que elevar su oferta como consecuencia de la operación, dado que solo se ajustan los pagos previstos para este año y la operación de TSB no se materializará hasta el primer trimestre de 2026.