La vicepresidenta y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, junto a Irene Montero
Los eufemismos de Yolanda Díaz: el veto a Irene Montero en Sumar fue una «renuncia»
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo ha asegurado que vetar no es su «estilo»
Yolanda Díaz ha tirado de eufemismos para referirse al veto impuesto a Irene Montero en las listas de Sumar. La vicepresidenta segunda del Gobierno ha negado en una entrevista en la Cadena Ser la mayor, como se le ha acusado desde el primer momento desde Podemos, el partido de la ministra de Igualdad, y ha asegurado que ese no es su «estilo». En contraposición, sí ha aludido a que en un acuerdo de coalición «complejo» y «difícil» entre una quincena de fuerzas de izquierda, incluida Podemos, ha habido «renuncias».
Y es que Díaz ha defendido en declaraciones a la Cadena Ser, recogidas por Europa Press, la labor de Montero y otros dirigentes que no estarán presentes en la candidatura, pues todas las personas son «importantes».
Pero a continuación ha resaltado que Sumar se ha construido concitando «muchas sensibilidades» y de forma «colectiva» para una gran confluencia de fuerzas de izquierda, la más amplia «de la democracia», que ha requerido «generosidad».
Prima lo colectivo
«He negociado muchas cosas pero este acuerdo ha sido muy difícil, pues sí, hay generosidad de muchísimas personas y de muchísimas personas. Hicimos lo que teníamos que hacer y estamos muy satisfechas. Salimos a ganar las elecciones con un proyecto que es una realidad», ha recalcado para insistir en que no hubo veto «de nadie» a la titular de Igualdad.
Precisamente tanto Montero como la líder de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, criticaron el «veto injusto» aunque la formación morada, en su último Consejo Ciudadano aunque finalmente asumió la exclusión de la ministra, al igual que su rol modesto dentro de Sumar
La candidata de Sumar a la Presidencia del Gobierno ha puesto en valor el trabajo de Montero y otros cargos que no figuran en listas como el líder de IU, Alberto Garzón, o no están en puestos de salidas como el dirigente de los 'comunes' Jaume Asens, que «van a seguir en política» aunque ha remarcado que lo más relevante es el proyecto colectivo.
«Las políticas individuales aportan poco, yo provengo de una cultura política de mirada ancha. Hoy Sumar es una realidad», ha agregado para conceder que, con el trabajo de Igualdad, España es un país «mejor» en derechos de las mujeres y los colectivos LGTBi.
El «ruido» de las listas
No obstante, Díaz ha admitido que «siempre hay ruido» en la conformación de las listas electorales en todos los partidos, llamando a recordar el último Comité Federal del PSOE con tensiones internas con la configuración de las candidaturas.
Eso sí, Díaz ha reseñado que en el caso de Sumar se verá una foto de unidad entre dirigentes de formaciones que antes eran rivales electorales, cuestionada sobre si líderes de partidos como Belarra, Íñigo Errejón (Más País) o Joan Baldoví (Compromís) compartirán conjuntamente escenario en campaña.
En cuanto a la incorporación de la dirigente de Podemos, Alejandra Jacinto, como portavoz de campaña electoral de Sumar en materia de vivienda, la vicepresidenta segunda ha rechazado calificarlo de «fichaje» porque la definición de los equipos «no es un mercadeo».
Los fichajes de Sumar
Al hilo, ha subrayado que la entrada de Jacinto va en línea con otras anteriores como la eurodiputada María Eugenia Rodríguez Palop, que coordina la elaboración del programa electoral, el exdirigente de Podemos Pablo Bustinduy o el portavoz de Sumar, el también europarlamentario Ernest Urtasun, que «no hacen más que ensanchar el proyecto y hacerlo grande».
Finalmente, ha remarcado que Sumar está trabajando con «ilusión» para que la derechas «no gobiernen en España» y que, sin entrar en encuestas, es consciente de que para reeditar un Gobierno progresista «Sumar tiene que ser muy ancho».
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