
El expresidente de Ciudadanos, Albert Rivera, en el anuncio de su fichaje por Martínez-Echevarría
Controvertida causa judicial
Albert Rivera entró en el despacho Martínez-Echevarría sin colegiarse, pero alega que no estaba obligado
El pasado miércoles 21 se celebró el juicio contra Albert Rivera por una demanda de competencia desleal presentada por el bufete que presidió
El despacho Martínez-Echeverría fichó a un nuevo presidente ejecutivo muy conocido, Albert Rivera, en marzo de 2020. El que hasta hacía unos pocos meses antes había sido el líder de Ciudadanos tenía como función la «captación de talento y de fortalecer el equipo de abogados de la firma». Un mes después también se incorporaba al bufete como vicepresidente ejecutivo el exnúmero dos del partido ‘naranja’, José Manuel Villegas. Ambos tenían una relación contractual de cinco años con la empresa, pero solo estuvieron dos.
El bufete demandó a Rivera por competencia desleal, y el pasado miércoles 21 de junio se celebró el juicio en el Juzgado de lo Mercantil Número 17 de Madrid. En este contexto, fuentes jurídicas han comunicado a El Debate que cuando el exlíder de Ciudadanos entró al despacho «no estaba colegiado a pesar de que su contrato le obligaba a estarlo. De hecho, no se colegió hasta un año después».
Por su parte, José Manuel Villegas, en representación de Rivera, ha relatado a este medio que «no era preceptivo que estuviera colegiado e hizo la colegiación tras entrar al despacho, en octubre de 2021». «No había ningún tipo de requerimiento para que estuviera colegiado ya que realizaba funciones ejecutivas, no tenía que ir a sala judicial», ha expresado Villegas.
La competencia desleal
El objeto de la demanda que se trató en el juicio de esta semana era una competencia desleal por parte de Rivera tras haber abandonado Martínez-Echevarría, ya que los exdirigentes de Ciudadanos fundaron la empresa R+V (RV Estrategia S.L) hace un año. El objeto social de esta compañía –tal y como está publicado en el Boletín Oficial del Registro Mercantil del viernes 1 de abril de 2022– es, entre otros, «la actuación, como mediadora en la prestación de servicios de carácter jurídico y legal»; y en ello basa la demanda el exbufete de Rivera y Villegas.El que fuera número 2 de Ciudadanos ha sostenido a El Debate que «el objeto social que se pone en las empresas es amplio, y nosotros incluimos la intermediación jurídica a pesar de que es un servicio que no hemos prestado». No obstante, Villegas ha querido matizar que «podríamos haber abierto un despacho de abogados si hubiéramos querido porque en las cláusulas de nuestro contrato solo se señalaba que no podíamos llevarnos clientes que hubiéramos conocido durante nuestro ejercicio. La demanda que me interpusieron a mí por esto, en la que pedían más de 6 millones, fue archivada por el juez».

Albert Rivera y José Manuel Villegas durante su etapa en Ciudadanos
Rivera durante el juicio
Villegas ha dictaminado que, durante la vista, después de que él «compareciera como testigo», le preguntó a Rivera «si se quería ir». La mano derecha de Rivera ha explicado que: «Albert le dijo a la jueza: 'su señoría, ¿me va a necesitar o me puedo marchar?', a lo que la jueza contestó que se podía ir. No se enfadó en absoluto». «Hubo una cosa curiosa, que es que ellos renunciaron a su interrogatorio. Esa es la cobardía de argumento que tienen», ha subrayado Villegas.
No obstante, fuentes judiciales han afirmado a El Debate que «Rivera se levantó y se fue sin pedir permiso a su señoría. Es algo que no es habitual, y más siendo parte demandada. La jueza se quedó extrañada, aunque no dijo nada».

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Martínez-Echevarría y Rivera y Villegas todavía tienen pendientes una causa civil por incumplimiento contractual, en el que se han cruzado sendas demandas. El exnúmero 2 de Ciudadanos ha aseverado que «reclamamos cantidades no pagadas, los no nombramientos de presidente y vicepresidente ejecutivos por parte de la administración del despacho, y la no entrada en el capital de la empresa, además de acciones».