Revertir las regularizaciones de inmigrantes ilegales, rebaja fiscal masiva y menos trabas, claves del programa económico de Vox

Vox ha presentado este domingo en un acto público en Madrid tras la Asamblea General Ordinaria su programa económico y de vivienda, una serie de medidas que van desde la masiva rebaja de impuestos o la reducción radical de los gastos de la administración pública hasta una revolución de la política energética, la simplificación administrativa, la ampliación de suelo o la prioridad nacional para superar la situación que en términos económicos atraviesan los españoles.

El secretario general del grupo parlamentario de Vox y portavoz de Economía y Energía, José María Figaredo, y el portavoz de Vivienda y diputado nacional, Carlos Hernández Quero, han expuesto el panorama actual y cuáles son, a su juicio, los motivos que han llevado hasta aquí. Vox parte de la premisa de que los españoles son cada vez más pobres y de que la España en la que había capacidad para crecer y prosperar hoy «ni está ni se la espera», como ha expresado Figaredo. «Nos han robado la España feliz. (...) Hemos dejado de ser un país de propietarios para convertirnos en un país de precarios sin casa», ha señalado Hernández Quero.

Han aludido así a la subida de los precios, al crecimiento de la deuda -según ha recalcado el portavoz de Economía cada español hoy tiene a sus espaldas una deuda de 33.000 euros-, a la precariedad y al paro, a la situación de la industria, a lo que supone la llegada masiva de inmigrantes también para el ámbito económico, y al enorme «desajuste» entre oferta y demanda y la consiguiente subida de los precios de la vivienda que la hace inaccesible para muchos jóvenes y personas de renta media o baja -tal como apuntó el portavoz de Vivienda, en 14 años ha caído a la mitad el número de españoles jóvenes que pueden comprar una-.

«El hexágono de la prosperidad»

En este contexto, el partido de Santiago Abascal articula lo que denomina el «hexágono de la prosperidad», puesto que son seis bloques que agrupan medidas que ya ha venido defendiendo todo este tiempo y otras nuevas para darle la vuelta al panorama actual. En este esquema la vivienda tiene un lugar destacado porque, como subraya Vox, «la vivienda en propiedad fue uno de los pilares del bienestar español y de la expansión de las clases medias» y actualmente «todos los indicadores de precariedad en el empleo, falta de vertebración territorial, desplome de la producción industrial, fiscalidad salvaje, imposibilidad de ahorro, etc. culminan en la dificultad de acceso a la vivienda a los españoles».

El primero de esos bloques es la reducción normativa y la eficiencia en la administración pública. Una de las cosas por las que aboga Vox es por que se deroguen tres normas por cada una aprobada. Propone establecer medidas para reducir la burocracia y eliminar las duplicidades, establecer una única base de datos nacional, para que no se tenga que aportar información que ya tenga la administración, así como impulsar el uso de la inteligencia artificial generativa para «agilizar y simplificar la administración pública».

Por otra parte, un elemento que Vox lleva defendiendo desde su llegada a la política es la rebaja fiscal drástica y masiva, del IRPF, del IVA o de la cuota de autónomos. Unas medidas que van ligadas a la reducción radical del gasto de la administración pública, con la eliminación de todas las subvenciones a partidos, sindicatos y organizaciones patronales, la reducción drástica del número de altos cargos, personal de designación política o cargos de confianza, la supresión de la financiación pública de los organismos ideológicos, o la reducción al mínimo necesario el tamaño de la administración pública, entre otras.

Otro de los puntos clave de su programa es la reindustrialización radical de nuestra economía, con una revolución, por un lado, de la política energética y con la defensa del sector agrícola como «pilar estratégico». En este eje, plantean que España abandone los acuerdos de París y se derogue el Pacto Verde Europeo; que se recupere el plan nuclear nacional; que se impulse un plan nacional de soberanía energética, así como un plan nacional del agua; y que se apoye a la industria agroalimentaria nacional y la producción de las pequeñas y medianas empresas de carácter asociativo y familiar.

Dedican otro apartado a varias de sus propuestas en materia migratoria, al considerar que el fenómeno de la inmigración ilegal y masiva lleva aparejadas consecuencias también a nivel económico y en el problema de la adquisición de la vivienda. Así, inciden en su postura de la necesidad de llevar a cabo deportaciones masivas de los inmigrantes que hayan accedido de forma ilegal a España y de aquellos que cometan delitos graves o reincidan en los delitos leves.

Proponen revertir «todas las regularizaciones de inmigrantes ilegales llevadas a cabo por el bipartidismo y auditar exhaustivamente todas las concesiones de nacionalidad de los últimos años». También, acabar con las políticas de efecto llamada, así como eliminar las ayudas y beneficios sociales, salvo la ayuda humanitaria, a quienes hayan entrado incumpliendo la ley. Plantean igualmente condicionar la prestación de servicios públicos a los inmigrantes legales «en función de sus años de cotización».

En materia de vivienda, para solucionar el problema de la oferta, plantean en su programa la ampliación de suelo disponible; que se acabe con el «secuestro» por parte de las Administraciones públicas; que haya menos trabas y burocracia y una simplificación administrativa; que se ponga fin a las medidas «intervencionistas» en el mercado de alquileres y que se lleva a cabo una «política de mano dura» contra la okupación y la inquiocupación.

Asimismo, proponen impulsar la construcción de vivienda protegida para familias españolas con avales de financiación, créditos o cesiones de suelo, y que a la hora de acceder a la vivienda social y protegida, el arraigo y el acumulado histórico de años de la familia en España sean los principales criterios para su asignación. También proponen prohibir el arrendamiento a inmigrantes ilegales y perseguir su empadronamiento ilegal, y acabar con la «adquisición masiva» de vivienda por capital extranjero, a través de una «fiscalidad diferenciada para compradores no comunitarios». E igualmente abogan por una fiscalidad que permita que «los españoles vuelvan a ser propietarios».

El economista Laffer apoya las propuestas de Vox

El famoso economista estadounidense Arthur Laffer ha mostrado su respaldo a las protestas en materia económica de la formación de Abascal. En un vídeo que ha compartido el partido, Laffer asegura que estas propuestas «están fundamentadas en una buena base económica y lograrán el efecto deseado de generar prosperidad en España».

Subraya la necesidad urgente de llevar a cabo una reforma fiscal, con rebaja de impuestos y una simplificación administrativa, así como de «racionalizar el gasto público». Para Laffer las propuestas de Vox «son muy buenas» y las recomienda «encarecidamente». «Tendrán el efecto de generar prosperidad en España», incide.