Yolanda Díaz y Marc Giró, haciendo sentadillas
Lo que decía Yolanda Díaz sobre vivir en una residencia oficial de 443 metros en Madrid: «Es una condena»
«Vivir en un ministerio es muy duro», afirmó en 2024 la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo en una entrevista a TVE
la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, vive en una residencia oficial de 443 metros cuadrados. Pero para ella no es suficiente o no es de su gusto. Así lo insinuó en una entrevista concedida a TVE en enero de 2024. «Vivir en Madrid es una condena», afirmó la dirigente de Sumar entre risas.
Fue en el programa Late Xou de TVE que presenta Marc Giró. El presentador afirmó que Díaz es «la primera en llegar a la oficina y la última en irse», pero con «un poquito de truco», debido a que la vicepresidenta vive en el mismo Ministerio de Trabajo y Economía Social, ubicado en la zona de Nuevos Ministerios de Madrid, en el paseo de la Castellana.
«Es una condena, Marc. Yo soy gallega, veo el mar… Estamos en Barcelona [grabando el programa] y hay mar. En Madrid no hay mar. El horizonte… El mar te da muchos matices y te enriquece. Es muy duro», aseguró Yolanda Díaz mostrando una sonrisa.
Marc Giró aprovechó estas declaraciones de Díaz para arremeter contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. «En Madrid no hay mar, todavía, porque como se pongan, son capaces. Como se ponga Ayuso, pues ahora hay mar, y punto», señaló el presentador. La dirigente de Sumar se sumó a esta burla, afirmando que «son capaces, van a ello». «Vivir en un ministerio es muy duro», añadió.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo reside en un piso de 443 metros cuadrados, propiedad del Estado. Además, este piso es el más grande de todos los que ocupan los ministros del Gobierno de Pedro Sánchez.
«Me gusta hacer sentadillas»
En definitiva, fue una entrevista amable para Yolanda Díaz. En un momento dado, la ministra de Trabajo reconoció que le gusta «hacer sentadillas sin parar» y que pone a todo su equipo a hacerlas. Incluso en lugares inesperados, como en los viajes internacionales o antes de los mítines.
Marc Giró le pidió que le enseñase a hacerlas. En principio se resistió, pero así acabó el programa, con unas sentadillas a dúo. El presentador no logró hacerlo de forma satisfactoria. «Como ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda, fenomenal, pero como coach de sentadillas, fatal», indicó el presentador.