Sindicatos de Policía piden la dimisión del delegado del Gobierno, Marlaska y Sánchez

Los sindicatos mayoritarios de la Policía, SUP, y la Guardia Civil, Jucil, han denunciado el apoyo expreso del Gobierno a las protestas propalestinas que se sucedieron ayer en Madrid en la Vuelta Ciclista y han exigido la comparecencia «urgente» del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska y el delegado del Gobierno como «últimos responsables de lo sucedido».

«Especialmente lamentable ha sido el bochornoso espectáculo protagonizado por determinados líderes políticos que llevan días buscando una imagen de confrontación con policías o guardias civiles que forman parte del dispositivo de protección de la prueba ciclista», lamentaban desde el sindicato policial CEP (Confederación Española de Policía).

Los agentes lamentan el «fracaso estrepitoso» del dispositivo de seguridad planteado ayer en la vuelta al que han calificado de «totalmente insuficiente» y que acabó con la cancelación del evento y 22 agentes heridos tras los violentos disturbios. «Han puesto en riesgo la seguridad de nuestros compañeros y de nuestro ciclistas alentando a la gente a salir a la calle», han lamentado desde Jucil.

Un desarrollo de los acontecimientos que horas antes de los disturbios desde UIP ya habían vaticinado que iba a ocurrir: «Los policías de la UIP estamos abandonados a nuestra suerte por el Ministerio del Interior», advertían. «Se ha atado a los Policías Nacionales de pies y manos», manifestaban desde SUP.

El clamor desde los sindicatos policiales ha sido unánime: «Somos neutrales políticamente», han reiterado. «En un estado de derecho los policías somos responsables y neutrales políticamente y no vamos a consentir que se nos use con fines partidistas», han denunciado desde SUP.

En la misma línea, desde CEP lamentaban las palabras de la líder de Podemos, Ione Belarra: «Hoy mismo, una de las responsables del partido Unidas Podemos ha llegado a acusar a nuestros compañeros de impedir el paso de personas a determinadas zonas del recorrido en la capital por 'llevar cosas de izquierdas', en un nuevo ejemplo de hasta qué punto alguien puede estar obsesionada con el trabajo policial que pretende garantizar la seguridad de todos».

Tras las declaraciones del delegado del Gobierno, Francisco Martín, que ha calificado las protestas de «pacíficas» y ha defendido la idoneidad del dispositivo planeado y desplegado para velar por la seguridad de La Vuelta, los sindicatos policiales Jupol, UFP, CEP y SUP han pedido su dimisión inmediata.

En concreto desde SUP aseguraban que van a emprender «medidas legales contra él», ya que «como responsable del dispositivo se ha puesto en riesgo la vida de miles de personas que acudieron al evento y además la de los policías al impedir que se usaran los medios de protección y el material antidisturbios desde el inicio de los ataques antisistema», han relatado.

El sindicato ha prometido, además, convocar concentraciones en protesta «por la inacción del Gobierno».

Por su parte Jupol ha exigido la dimisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el delegado del Gobierno en Madrid. Jupol ha lamentado que no hubiera trabajo preventivo de «embolsamiento y expulsión» de individuos violentos, lo que ha atribuido a «órdenes políticos». «El operativo de seguridad fue un auténtico desastre, no por la profesionalidad de los agentes desplegados, sino porque estuvo marcado desde el inicio por la voluntad de no incomodar a determinados grupos y por el blanqueamiento institucional de las protestas», ha expuesto.