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28 de marzo de 2024

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonés

El presidente de la Generalitat, Pere AragonésEFE

Aragonès saca la artillería: más leyes y más inspecciones para blindar la inmersión lingüística

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, asegura que el Gobierno catalán va a llevar a cabo una «ofensiva legislativa» para «blindar la inmersión lingüística». No sólo eso, también habrá más inspectores que vigilarán que se cumplen los proyectos lingüísticos de los centros y también se incrementará el número de profesores en las aulas en las que se aplique un 25 % de las clases en castellano. Y en paralelo, desde la consejería de Educación se irá impulsando el plan anunciado recientemente para fomentar el uso del catalán en los centros escolares.
Éstas son algunas de las cuestiones que se han acordado en la cumbre que se ha celebrado este jueves con entidades educativas y sociales, como respuesta a la sentencia del TSJC que obliga a una escuela de Canet de Mar a dar más horas de español en un grupo de P5.
Según Aragonès, este «ataque a la lengua» lo es también a «los pilares de la convivencia». Y considera que no sólo se está jugando el futuro del catalán, sino también «una idea común de país y el futuro de Cataluña tal y como lo hemos entendido hasta ahora».
Para blindar este modelo educativo, se impulsarán nuevas leyes para proteger el sistema educativo de los ataques judiciales, según Aragonès. En cualquier caso, desde el Govern dicen que se va a buscar el «consenso» de partidos y entidades, como ya lo hubo hace treinta años.
También se va a intensificar a partir de este viernes el control de «los proyectos lingüísticos vigentes y garantizar su cumplimiento» y los inspectores vigilarán que lo que está establecido en estos proyectos «sea lo que pasa dentro de las aulas», en palabras del presidente de la Generalitat. Es decir, «si la clase de matemáticas se tiene que hacer en catalán hay que garantizarlo», apunta Aragonès.
Además, se encargará un informe a la Universidad de Barcelona (UB) para analizar la situación del catalán. Y se incrementará en 35 el número de profesores en aquellas aulas en las que se aplique la cuota del 25 % en castellano. ¿Y por qué 35? Porque es el número de aulas en las que hay una sentencia judicial que obliga a impartir más español. El consejero de educación dice que son los centros afectados los que determinarán cómo se organizan. Habrá, por lo tanto, dos profesores en estas aulas, aunque González-Cambray no ha precisado si uno de los docentes se dirigirá a los alumnos en catalán.
Esta cumbre en el Palau de la Generalitat se ha celebrado horas después de que una docena de entidades que defienden el bilingüismo hayan presentado la campaña «Escuela de todos», con el objetivo de que la Generalitat cumpla con las sentencias relativas a la enseñanza de castellano en el aula. Eso, y evitar que vuelva a pasar un caso Canet. Por cierto, que desde que empezó la polémica por la sentencia de la escuela de Canet han aumentado las peticiones de padres que piden más español para sus hijos. Son unas 60 peticiones las que se han formulado sólo en las últimas semanas. 
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