Sánchez se reunirá con Junqueras en enero para abordar la «continuidad» de la legislatura

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reunirá con el líder de ERC, Oriol Junqueras, a principios de 2026 para abordar la «continuidad» de la legislatura. Así lo ha anunciado el vicesecretario de Comunicación y portavoz de los republicanos, Isaac Albert, en una rueda de prensa este lunes, en la que ha revelado que Junqueras y Sánchez hablaron por teléfono este fin de semana.

Pasadas las vacaciones de Navidad ambos dirigentes se verán las caras, en un encuentro motivado por «las noticias aparecidas que pueden poner en riesgo la continuidad de la legislatura», según ha señalado Albert. Según el portavoz, el encuentro no se realiza esta misma semana debido a que Sánchez se encuentra participando en el Consejo de Europa.

Será la primera reunión entre Sánchez y Junqueras desde que este segundo salió de prisión, tras ser indultado en 2021; el exvicepresidente de la Generalitat cumplía condena por sedición y malversación como una de las principales mentes pensantes del procés. Está previsto que hablen sobre las investigaciones por corrupción y acoso social en el seno del PSOE, pero también del cumplimiento de los acuerdos pendientes.

Según Albert, Junqueras ha propuesto a Sánchez que abra una ronda de contactos con los grupos parlamentarios que dieron apoyo a su investidura para explicar «qué piensa hacer» ante los casos de corrupción y de acoso, y exige «medidas para democratizar plenamente todos los ámbitos institucionales que continúan con déficits democráticos, entre ellos su propio partido».

«Ya no cuela»

La noticia del futuro encuentro entre Sánchez y Junqueras ha trascendido el mismo día en el que Gabriel Rufián, portavoz de ERC en el Congreso, también ha pedido una reunión «a la cara» con el presidente del Gobierno para saber cómo piensa «regenerar» tanto su partido como el Ejecutivo. «Hablar de una conspiración» o recurrir al ‘y tú más’ «ya no cuela», ha dicho a su llegada a la comisión de investigación sobre la dana de Valencia.

Rufián, que lleva un tiempo ajustando su discurso, ha admitido que tiene dudas «frente a todo lo que está pasando» y asegura que los socios están pasando «vergüenza» con el PSOE. «Muchos no queremos que Santiago Abascal sea vicepresidente, pero tampoco seguir pasando vergüenza como estamos pasando cada día», ha dicho.

Preguntado sobre si le parecen peores los casos de acoso o los de corrupción, Rufián ha respondido que «evidentemente» todo le parece «mal», y ha planteado la siguiente reflexión: «¿Aguantar esta situación es bueno porque así no llega la derecha o la otra derecha? La cuestión es cuánto más se infla la derecha o la otra derecha con la permanencia de esta situación y, cuando lleguen, ¿cuántos años más van a estar?».

Más allá de la retórica de Junqueras y Rufián, lo que está de fondo son los cálculos pre-electorales en ERC –y en Junts– sobre si pesa más el coste de seguir sosteniendo a Sánchez o el beneficio que podrían obtener de un Gobierno cada vez más débil. Así lo defendió públicamente la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, el pasado viernes.

En una entrevista para el programa Cafè d’Idees de RTVE, la escudera de Carles Puigdemont en Madrid pedía a los republicanos hacer un frente común separatista para arrancar concesiones inéditas a Sánchez: «Realmente están débiles y están divididos, debemos convertirlo en nuestra fortaleza», dijo, evidenciando que la anunciada ruptura queda en agua de borrajas ante la perspectiva de sacar rédito.