El portaaeronaves LHD Juan Carlos I de la Armada española vuelve a encabezar el grupo anfibio Dédalo con sus aviones Harrier y sus helicópteros AB212. En esta ocasión, el ejercicio de la OTAN Neptune Strike 23 une al buque insignia español con el portaaviones británico 'Queen Elizabeth' y el italiano 'Cavour', con cuyos aviones se integrarán los Harrier de la Armada. El grupo comienza los ejercicios de vigilancia reforzada de la OTAN desde este lunes y hasta el 9 de noviembre.
El grupo español está formado también por el 'Castilla' con helicópteros SH60F, la fragata 'Numancia' y su helicóptero SH60B y el 1º Batallón de Desembarco del Tercio de Armada, embarcado en los dos primeros, colaborarán con medios navales, aéreos y terrestres de hasta otros diez países aliados para demostrar la solidaridad de la OTAN y sus capacidades.
Según ha informado el Estado Mayor de la Defensa, la actividad 'Neptune Strike' será dirigida desde el Cuartel General del ‘Naval Striking and Support Forces NATO’ (STRIKFORNATO) en Oeiras (Portugal) y va a incluir ejercicios y misiones coordinadas entre los tres portaaviones en los cielos de Bulgaria, Polonia, Alemania, Letonia, Lituania, Estonia, Croacia, Montenegro, Albania, Italia y Grecia.
Además de la intensa actividad aérea, también se van a realizar actividades anfibias en el litoral albanés e italiano, lideradas por el 2º Batallón de Desembarco de Infantería de Marina.
El Grupo Expedicionario 'Dédalo 23' reforzará así durante unos días al dispositivo español que participa en las tareas de vigilancia de la OTAN junto con el Battlegroup español en Letonia, los destacamentos del Ejército del Aire y el Espacio en Rumanía y los buques integrados en las en las Agrupaciones Permanentes de la Alianza.
La OTAN, por su parte, ha subrayado que estos ejercicios marcan el «compromiso de la Alianza de la OTAN con la soberanía y la libertad», que «sigue siendo tan fuerte y relevante como siempre».
Para la Alianza, la serie Neptune Strike es una demostración tangible del poder y la capacidad de la Alianza de la OTAN en operaciones multidominio, destacando la evolución natural de la capacidad de la OTAN para integrar las capacidades de guerra marítima de alto nivel de los grupos de ataque de portaaviones para apoyar la defensa de la Alianza mediante la ejecución de Actividades de Vigilancia mejoradas (eVA).
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