Más claros que oscuros para el balonmano cordobés

El fin de semana dejó más regusto dulce que amargo en los pabellones para el balonmano cordobés. En Puente Genil, el Ángel Ximénez firmó su primera victoria del curso en un duelo de los que valen permanencias. El conjunto de Paco Bustos tiró de carácter para remontar ante el REBI Cuenca (22-21) en un partido áspero y de defensas. Cuando todo parecía perdido, Dani Serrano apareció para marcar el gol decisivo sobre la bocina y desatar la locura en el Alcalde Miguel Salas. Sufrido, sí, pero también necesario: los pontanos enlazan dos triunfos y miran la tabla con otro ánimo.

En clave femenina, el Rahi-Sepisur Córdoba confirmó su gran arranque de temporada con una victoria de prestigio en Pamplona (27-28). Las de Rafa Moreno tuvieron que remar desde el 6-2 inicial, pero lo hicieron a golpe de orgullo y con una Ángela Ruiz estelar, autora de 12 goles. La fuensantina volvió a liderar a un grupo que ya suma dos de dos y que demostró que también sabe ganar partidos apretados lejos de casa. En el momento clave, el bloque cordobés se mantuvo firme y celebró una victoria que alimenta su confianza.

No pudo redondear la jornada el Deza CBM, que se quedó a las puertas del milagro ante el Estudiantes de Ceuta (31-32). Las granates dominaron el primer acto, pero el cuadro norteafricano apretó tras el descanso y llegó a mandar por seis tantos. Aun así, las pupilas de Benito Puerto tiraron de casta y coraje para acercarse en el tramo final, aunque la reacción se quedó sin premio. Fátima despidió a las suyas con una ovación merecida, consciente del esfuerzo y de la imagen ofrecida.

En Primera Nacional, hubo de todo: el ARS Palma del Río sigue creciendo tras vencer en Mijas (30-34), La Salle dejó escapar el triunfo ante Montequinto (30-30) y el Cajasur CBM encajó su primera derrota en Algeciras (30-28). Los de Jesús Escribano pagaron un mal tramo en la primera mitad, aunque compitieron hasta el final. El ARS, por su parte, se consolida en la zona alta.