Ayuso redobla su apuesta contra la inmigración ilegal: pide el cierre de los centros y llevará el tema a la UE

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado este martes que llevará ante la Unión Europea y «donde alga falta» las políticas migratorias del Gobierno de Pedro Sánchez que, a su juicio, están «reventando el país», al tiempo que ha exigido el cierre de los centros de inmigrantes del Ejecutivo instalados en Alcalá de Henares, Pozuelo y Carabanchel.

La dirigente autonómica ha estallado contra el Ejecutivo central por dejar crecer el fenómeno migratorio sin control, lo que está provocando situaciones como la violación a una joven la semana pasada en Alcalá de Henares y el temor despertado en Pozuelo de Alarcón por la llegada de 400 menores extranjeros no acompañados.

«La inmigración irregular masiva es uno de los grandes desafíos a los que se enfrentan España y toda Europa y creo que está provocado y está perfectamente medido por el Gobierno para crear problemas de convivencia y saturar los servicios públicos y reventar el país», ha manifestado Díaz Ayuso tras participar en una jornada sanitaria organizada por elEconomista.

Para la presidenta regional esta postura es «desleal con los inmigrantes que trabajan y que levantan España cada día y que no tienen por qué ser ni señalados ni tienen por qué ser culpados por esa negligente gestión del capitán del barco pirata», en referencia a Pedro Sánchez.

Así, ha avanzado que su Gobierno va a hacer «todo lo que esté en su mano» para que cierren los centros de Alcalá, Pozuelo y Carabanchel. «No podemos consentir que haya decenas de miles de personas deambulando por las calles de Madrid sin sentido, sin rumbo, sin integrarse, sin conocer quiénes son, de dónde vienen, qué problemas traen, no se puede gestionar de esta manera», ha censurado.

«Esto se une a los centenares de miles de personas que todos los años están entrando por la puerta de atrás por Barajas unido al drama de los menores, política que se extiende a ellos», ha apostillado.

Asimismo, ha aprovechado para trasladar todo su «cariño y apoyo» a la alcaldesa de Alcalá de Henares, Judith Piquet, que «no es culpable de nada de lo que está sucediendo y, sin embargo, ha tenido que escuchar cómo estos días le han dicho que es cómplice de la última violación a una chica en las calles de Alcalá».