Gucci, con prisas por cambiar

La gran marca italiana del grupo Kering no gana dinero desde hace un par de años y la situación se resiente. El grupo necesita de Gucci para su rentabilidad y ahora que el nuevo creador designado a bordo, Demna Gvasalia, se tomaba las cosas con calma, le acaban de cambiar el plan de desfiles y le han metido la prisa en el cuerpo.

Kering, antes grupo PPR, habría comprado el grupo Gucci en su día para enriquecer su oferta y competir con LVMH. Al comprar los Pinault el grupo Gucci se hacían con la gran marca italiana en sí pero también con Saint Laurent, Boucheron o Balenciaga, entre otras enseñas que Domenico de Sole y Tom Ford habían comprado previamente.

Tras la época de Alessandro de Michele en Gucci, que empezó con el desfile de «la vieja del visillo» y acabó con una idea romántica y rompedora de la marca, han designado a Demna Gvasalia, el georgiano que ha revolucionado Balenciaga con colecciones imposibles y productos tan útiles como las bolsas de basura comunitarias hechas en cuero negro por 2,800 euros. Al llegar Demna a Gucci hace unos meses, el georgiano explicó que no llevaría a cabo ningún desfile hasta marzo de 2026, por lo que tenía tiempo para madurar el giro que deseaba otorgarle a la marca. Adujo, inocentemente, que no iba a presentar nada antes de la colección otoño-invierno 2026-27. Pero las cosas han cambiado. No hay margen para tanta tardanza.

Los maravillosos archivos

Impresionado por unos maravillosos archivos que yo conocí personalmente hace años cuando trabajaba en Gucci, Demna se ha dado cuenta de que tiende donde copietear. Y en la empresa le han dicho que con tanto entre lo que elegir, más le vale lanzar lo que sea ya para traer «pasta fresca a casa». Así que Demna Gvasalia ha dicho: «Me quedo con el Gucci de Tom Ford». Así cualquiera. Esa época de una elegancia más discreta y algo bohemia fue la que me tocó vivir en la gran marca. Fue cuando Gucci se quedó con el mercado entero. Así que el mismo Demna que declaraba «necesito varios meses para desarrollar mi visión de Gucci», ahora dice que ya saca colección en septiembre.

Y es que el nuevo CEO del Grupo, Luca De Meo, que sale ahora de Renault dejando buenas cifras tras 5 años de mando, sabe que el puesto que le cede François Henry Pinault lo tiene que amortizar rápido: parece ser que su remuneración de 2025 (unos 28 millones de euros por estos 4 meses de otoño) dependen total y exclusivamente de que supere los resultados esperados a fin de año. Así que no sabemos si en tan poco tiempo lanzarán la gallina de los huevos de oro o se pondrán a recuperar a los HNWI, High Net Worth Individuals, «uséase, los forraos de verdad», con piezas imposibles.

Lo que es evidente es que Demna Gvasalia ha dejado que se filtren unas imágenes de su supuesta nueva colección de hombre para testar el mercado; en ellas, una versión del hombre «GucciFord» pasado por el colador de los países del radio de la antigua URSS, parece la opción elegida. Gvasalia sabe que copiando a Ford no se confunde. Al final, parece que le han contratado para crear noticia y parecer rompedores, cuando en la base, las croquetas de hoy llevarán dentro la carne que sobró en la época del brillante Tom Ford. Interesante. Continuará.