El zorzal es un ave migratoria que pasa la primavera y el verano en los países del norte de Europa, mientras que en otoño e invierno se desplaza a regiones más cálidas del continente. Su alimentación se basa principalmente en pequeños insectos y frutos, especialmente bayas, aunque es con la aceituna con la que se le asocia más comúnmente. Y si su dieta incluye este fruto tan apreciado, ¿cómo no va a ser una delicia en la mesa?
INGREDIENTES
1 docena de zorzales
6 alcachofas frescas
Foie
360 g de arroz Bomba
1,8 L de caldo de ave (la cantidad puede variar según el diámetro de la paella; en este caso, se usó una de 50 cm)
2 ñoras
1 pimiento rojo
1 pimiento verde italiano
1 cebolla pequeña
1-2 dientes de ajo picados
1 tomate maduro picado
250 g de tomate triturado
Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
Azafrán de La Mancha
Romero fresco
Sal
ELABORACIÓN
Sofreímos los zorzales en la paella con un poco de AOVE y los reservamos.
En el mismo aceite, añadimos la cebolla picada y, cuando haya perdido el orgullo «que este trasparente», incorporamos el ajo y los pimientos troceados.
Agregamos las ñoras previamente hidratadas y las alcachofas limpias y cortadas en cuartos. Sofreímos bien hasta que las verduras estén tiernas.
Añadimos el tomate picado y el tomate triturado, cocinando hasta obtener un sofrito concentrado.
Incorporamos el arroz y lo nacaramos con el sofrito.
Vertemos el caldo caliente, añadimos el azafrán y sal al gusto. Dejamos cocinar durante 16 minutos.
Justo antes de terminar, colocamos unas ramitas de romero y trozos de foie sobre la paella. Sopleteamos el romero para potenciar su aroma y tapamos la paella, dejándola reposar 5 minutos para que se ahúme ligeramente.