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07 de mayo de 2024

Dos niñas se abrazan en la puerta del colego

Dos niñas se abrazan en la puerta del colegioEFE

Una familia y dos colegios: la prioridad educativa que afecta a los hermanos separados en centros distintos

La socióloga Maite Egoscozabal advierte que esta situación puede causar cierta confusión en las familias y, lo que es peor, llevar a la comparación entre los hermanos por los distintos proyectos educativos de cada colegio

Carlos T. sale de casa cada día con su hija mayor a las 08:45. Cinco minutos después, lo hace su mujer, Almudena F., con la pequeña, que ha empezado este curso Educación Infantil. La jornada escolar de ambas hermanas empieza a las nueve de la mañana y a ambos colegios tardan desde su casa entre 10 y 12 minutos; al de la primogénita hay que ir en coche, mientras al de la hermana menor se puede llegar a pie.
Que los hermanos de una misma familia tengan que acudir a centros escolares diferentes «ocurre más de lo que podemos imaginar», sentencia Maite Egoscozabal, socióloga del Club de Malasmadres. «Ya sea porque no se haya entrado en el centro elegido o por las diferencias de edad o necesidades educativas que puedan tener», continúa.

Aula matinal, solo para algunos

Esta realidad supone para los padres «un grave problema de conciliación», en palabras de la socióloga. Muchas empresas ofrecen flexibilidad horaria de entrada y salida, y también los centros aulas matinales de entrada temprana, pero su coste no siempre se lo pueden permitir las familias.
Esta es la opción por la que optan Carlos y Almudena cuando uno de los dos no puede hacerse cargo del transporte al colegio un día. En Extremadura, la comunidad autónoma en la que viven, el coste de dejar a los niños antes de la hora habitual es gratis desde enero de 2022, pero por ejemplo en la vecina Andalucía tiene un coste de 1,33 € el día suelto o 17,51 la tarifa mensual, o en Castilla-La Mancha, donde sube a 2,48 € al día o 2,98 si se contrata de manera esporádica.

Reunificación familiar

A la pareja le gustaría que ambas hermanas estudiasen en el mismo centro, concretamente al que va la pequeña, pero no han conseguido plaza; no solo por la facilidad que supone la hora de entrada y salida de clase, sino porque ambas reciban la misma educación.
Sobre este concreto detalle, la socióloga advierte que puede causar cierta confusión en las familias y, lo que es peor, puede llevar a la comparación entre los hermanos. «Cada centro tiene su metodología y proyecto educativo e inevitablemente se generan diferencias entre hermanos que acaban afectando a la manera en que queremos educar a nuestros hijos», indica.
En Madrid, Valencia o Andalucía, las consejerías de Educación priorizan la reunificación de hermanos que son alumnos de colegios distintos, dando más puntos en el proceso de solicitar plaza en el centro deseado. Generalizar esta cuestión eliminaría las barreras en conciliación surgidas a raíz de esta situación, pero también una mayor flexibilidad para poder restar el tiempo de transporte del coste de la conciliación en el cuidado de los hijos.
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