La Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, en una imagen de archivo
Iñaki Urdangarin y la Infanta Cristina se ven las caras en el último adiós a Eduardo Roldán
Se ha visto juntos por segunda vez tras el anuncio de su separación a principios de este año
La catedral de Jaca ha sido el lugar escogido para celebrar este domingo un solemne funeral por Eduardo Roldán, ex presidente de la Real Federación Española de Deportes de Invierno y también miembro del Consejo de la internacional de esquí. Una figura clave dentro del mundo de los deportes de invierno en España, pero, sobre todo, un pilar importante dentro de la Familia Real.
Hasta allí han acudido las Infantas Elena, Cristina –dos de sus hijos– e Iñaki Urdangarin. A pesar de estar ya inmersos en el difícil proceso de disolver totalmente su matrimonio, Iñaki y Cristina han dejado a un lado sus diferencias para acudir hasta Aragón, donde se han despedido de Roldán, con quien les unía una gran amistad desde hace años.
Conscientes de la expectación que podía casuar el volver a verles juntos por segunda vez, Urdangarin y Doña Cristina han tratado de mantener la distancia lo más posible. Ambos han coincidido en la entrada de la catedral en el momento de dar el pésame a la familia de Roldán. Una vez dentro del templo, se han sentado en filas distintas. Así, el exdeportista se ha ubicado, acompañado de sus hijos, en una de las filas, mientras que las Infantas se han sentado en la que se encontraba por delante. Una manera de poder coincidir en el funeral de Eduardo Roldán, pero sin ser ellos los protagonistas de un momento tan doloroso.
Una historia que comienza en blanco
Eduardo Roldán murió el pasado viernes en la clínica Universitaria de Navarra, en Pamplona, a los 83 años, por una enfermedad degenerativa. Cuando ya estaba hospitalizado, el Rey Don Juan Carlos, íntimo amigo de Roldán, le llamó por teléfono para interesarse por su estado de salud, consciente de que posiblemente aquella sería la última vez que iban a charlar. Roldán y Don Juan Carlos tenían una de esas amistades que el tiempo, lejos de quebrar, la afianza. El primero fue profesor de esquí del segundo y con el paso de los años el alumno terminó superando al mentor. Con eso y todo, Don Juan Carlos y Eduardo Roldán seguían disfrutando de la indescriptible sensación de deslizarse por una montaña.
Los Reyes Juan Carlos I y Sofía de Grecia con el Rey Felipe VI en la estación de Baqueira
El Rey Felipe VI, también alumno y amigo de Roldán, no pudo estar presente en el funeral, por lo que acudió este sábado al tanatorio de Jaca. Fue una visita privada e íntima en la que Felipe VI quiso apoyar personalmente a la familia de Roldán en un momento tan duro. Un detalle que ha emocionado al entorno más cercano de Roldán.
La Familia Real mostró también su más sentido pésame por la pérdida de Roldán y envió al tanatorio tres coronas de flores: una en nombre del Rey Juan Carlos I y la Reina Sofía, otra de los Reyes Felipe VI y Letizia y una tercera por parte de las Infantas.
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