Shakira, en compañía de su padre el día que le dieron la estrella en el Paseo de la Fama en Hollywood
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La preocupación de Shakira por el delicado estado de salud de su padre
Con 91 años, debe ser operado de urgencia marcando, así, la hoja de ruta de la cantante
La vida de Shakira iba dar un giro de 180 grados el pasado mes de enero cuando se oficializase su ruptura con Gerard Piqué y pusiese tierra de por medio. La cantante colombiana tenía previsto instalarse en Miami con sus hijos, Milan y Sasha, y sus padres. Sin embargo, se ha visto obligado a retrasar su nueva vida al otro lado del Atlántico por el delicadísimo estado de salud de su padre. William Mebarak, de 91 años, tendrá que someterse a una operación en los próximos días, tal y como han avanzado algunos médicos.
De momento, no ha trascendido el motivo por el que debe pasar por el quirófano, pero lleva sufriendo distintos contratiempos desde hace varios meses. Ha sufrido covid y en noviembre tuvo que ser ingresado en la Clínica Teknon-Quiron de Barcelona. Las causas de este ingreso aún se desconocen, pero todo apunta a que serían complicaciones derivadas de la caída que sufrió en el mes de mayo en casa de la artista.
De hecho, cuando la ambulancia se personó en el domicilio, la prensa especuló sobre la posibilidad de que a Shakira le hubiera dado un ataque de ansiedad debido a la situación que vivía en aquel momento con Piqué. Sin embargo, las fuentes personadas en el lugar de los hechos demostraron que era su padre el que necesitaba ayuda médica por un fuerte traumatismo en la cabeza.
Shakira, junto a sus padres William y Nidia Mebarak
Desde entonces, Shakira ha sido un auténtico apoyo en su recuperación. En varias publicaciones de redes sociales se ve cómo se desvive por él e, incluso, le ayuda a hacer los ejercicios de rehabilitación recomendados. Su preocupación es tal que llegó a pensar en contratar un avión medicalizado que pudiese trasladarlo sin riesgos a Miami y ser tratado allí de sus dolencias, pero los médicos lo desaconsejaron dada la gravedad del asunto.
A pesar de los contratiempos y de la guerra mediática entre Shakira y Piqué, el exfutbolista quiso demostrar que con sus suegros sigue manteniendo una buena relación y acudió al hospital para verlos en uno de sus últimos ingresos. Un gesto de amabilidad en pleno proceso de separación que Nidia Ripoll, madre de Shakira, quiso agradecer públicamente. «Claro que sí, seguimos siendo familia», declaraba haciendo alusión al vínculo que les une por sus nietos.
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