El Rey Felipe con el equipo de Piú Di Prima
El restaurante italiano de Madrid en el que te puedes encontrar al Rey
Don Felipe es un amante de la buena mesa y se deja ver con naturalidad en muchos templos gastronómicos del centro de la capital
risottos típicos del norte de Italia, pasta fresca y una bodega con etiquetas interesantes. El mítico restaurante Piú Di Prima, en la zona de Pintor Rosales, ofrece alta cocina italiana capitaneada por el chef Roberto Pagano, originario de la hermosa Modica en Sicilia. Recientemente han recibido la visita del Rey Felipe.
«Un honor inigualable tener la distinguida visita de Su Majestad el Rey en Piú di Prima. Nos sentimos profundamente agradecidos, será una velada única que quedará grabada en nuestra historia con el sello real de aprobación!», escribían en sus redes sociales, junto a una fotografía del equipo con el Rey.
Aunque la imagen fue compartida este jueves, desde el restaurante no especifican qué día recibieron la visita de Don Felipe. Tampoco han revelado detalles sobre los platos del menú que degustó, guardando siempre la confidencialidad que exige este tipo de visitas privadas. Sí deslizan que en todo momento se mostró muy natural y agradable, accediendo a fotografiarse con el equipo.
Piú de Prima
En la carta de Piú de Prima apuesta por una cocina regional en torno al Véneto, Piamonte, Abruzo y La Toscana. Como entrante ofrecen un delicioso Vitello Tonnato, unas finas láminas de ternera con salsa de atún y mahonesa. Entras las pastas, destaca el raviolone (no ravioli, debido a su tamaño) con crema de parmiggiano, yema de huevo de corral, espinacas y trufa rallada en la mesa. Una receta del siglo XV que solía ser la preferida de la nobleza italiana debido a su exquisitez. También los tagliatelle con trufa negra y huevo escalfado.
Imprescindibles en su carta son los risottos, elaborados con arroz italiano y terminados con las codiciadas trufas del país alpino, negra o blanca en función de la temporalidad. Disponen también de una amplia variedad de 16 pizzas. La más popular es la bufalísima, seguida de la parmiggiana o la tartufata.
En el capítulo dulce, destacan un tiramisú clásico veneciano con gotas de chocolate y amaretto, su strudel de manzana (influencia del sur del Tirol) y el refrescante semifrío de mojito en tres texturas.
El restaurante abrió sus puertas en el año 2000, en la calle Hortaleza, capitaneado por el chef veneciano Stefano Franzin. Después de una larga temporada cerrado, iniciaron una nueva andadura en el Paseo Pintor Rosales para hacernos viajar a Italia con los sentidos.
Comentarios
