Cristiano Ronaldo revela cómo pidió matrimonio a Georgina y por qué esperó a cumplir 40 años

Cristiano Ronaldo y Georgina Rodríguez anunciaron en agosto su compromiso tras casi una década de relación, sorprendiendo a sus seguidores con un emotivo mensaje de la modelo: «Sí, quiero. En esta y en todas mis vidas», junto a una fotografía de sus manos luciendo un espectacular anillo de diamante oval que el futbolista eligió para sellar su propuesta.

La pareja, que comenzó su historia de amor en 2016, tras conocerse cuando Georgina trabajaba como dependienta en Gucci, ha formado una familia numerosa y unida. Juntos tienen dos hijas, Alana Martina y Bella Esmeralda, mientras que la influencer también ha criado a los otros tres hijos de Cristiano: Cristiano Jr. y los mellizos Eva y Mateo.

Durante los primeros meses tras anunciar su compromiso, ambos mantuvieron discreción sobre los detalles de la pedida de mano y los planes de boda. Sin embargo, Cristiano se ha abierto ahora en una entrevista con Piers Morgan, donde explica las razones por las que esperó hasta los 40 años para dar el paso y ha compartido cómo fue el momento de la proposición.

Según confiesa, no se trató de resistirse al matrimonio, sino de esperar el «momento ideal» para avanzar en este nuevo capítulo de su vida: «A veces necesitas tiempo para darte cuenta que no estás cometiendo un error. A Gio le propongo matrimonio no solo porque es la madre de mis hijos, sino porque es la persona a la que más quiero. Es el amor de mi vida».

El ex jugador del Real Madrid relata que, aunque llevaba tiempo pensando en pedirle matrimonio, no sabía exactamente cómo hacerlo. «Las cosas buenas vienen de forma natural», afirma, comparando este proceso con otros aspectos de su vida y su carrera futbolística. Georgina ya le había expresado que uno de sus sueños era recibir un anillo de compromiso, y Cristiano pasó un tiempo considerable hasta encontrar la piedra adecuada que estuviese a la altura de su futura esposa.

Finalmente, organizó una cena especial para entregárselo, ayudado por un amigo que grabó el momento. La situación se tornó aún más emotiva cuando sus hijas, Alana y Eva, entraron en la habitación y preguntaron: «Papá, ¿le vas a dar el anillo a mamá y le vas a pedir que os caséis?». Fue entonces cuando Cristiano supo que era el momento perfecto para dar el sí.

A diferencia de la tradición, el futbolista no se arrodilló, pero pronunció palabras sencillas y sinceras antes de entregarle el anillo. «No soy ese tipo de hombre que trae flores a casa todas las semanas, pero soy romántico a mi manera. Fue precioso, sabía que era la mujer de mi vida», recuerda. Por su parte, Georgina reaccionó con incredulidad al principio, pensando que se trataba de una broma, lo que Cristiano confiesa que le encantó. El ver la emoción y sorpresa de su pareja provocó que al portugués se le saltaran las lágrimas.

El compromiso de Cristiano y Georgina también ha evidenciado la fortaleza de su relación, basada en el apoyo mutuo. El futbolista destaca cómo su pareja ha sido un pilar fundamental, especialmente durante los momentos difíciles, como la pérdida de un bebé en 2022, y cómo esto consolidó aún más su vínculo. «Creo que es única en ese sentido. Me cuida a mí, a nuestra familia, nuestra casa… es muy especial porque, aparte de sus cualidades, es una persona que nos entiende y nos cuida», afirma Ronaldo.

En cuanto a la boda, aún no hay fecha ni lugar confirmados, aunque sí se sabe que se celebrará después del Mundial de Los Ángeles en verano de 2026. Cristiano ha dejado claro que respetará el estilo de celebración que Georgina prefiere: íntimo y privado, sin grandes fiestas. Mientras tanto, la pareja continúa disfrutando de su vida familiar y su relación, consolidada tras años de amor, apoyo y cinco hijos que son el motor de sus vidas.