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Rama Duwaji y Zohran Mamdani

Rama Duwaji y Zohran MamdaniGTRES

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Así es Rama Duwaji: artista, activista política sirio-estadounidense y mujer del nuevo alcalde de Nueva York

Pertenece a una nueva generación de artistas que transitan entre el activismo político y la cultura

De la noche a la mañana, Zohran Mamdami hizo historia al convertirse en el primer alcalde musulmán de la Gran Manzana, abriendo un nuevo camino para la política en el centro neurálgico de Estados Unidos. Le acompaña en su andadura la que será la 'primera dama' de la ciudad más joven de la historia, Rama Duwaji, quien también está dejando su huella a su manera.

Sin ir más lejos, el look que escogió para la primera aparición pública tras la victoria lanzaba un mensaje pro-palestina. Apareció con un top negro de la firma Zeid Hijazi que ronda los 300 euros y que destaca por el bordado tradicional palestino que tiene en la zona central.

«No hay nadie a quien preferiría tener a mi lado en este momento y en cualquier otro momento», reconocía su marido en el discurso tras su victoria. La pareja se conoció años atrás en la aplicación de citas Hinge, mucho antes de que el nombre de Mamdani cobrara relevancia en la política estatal. «Todavía hay esperanza en esas aplicaciones de citas», declaró Mamdani en el podcast The Bulwark durante su campaña.

Duwaji es una fuerza creativa por derecho propio. Artista, ilustradora y ceramista sirio-estadounidense, su obra habla por sí sola, sin necesidad de alzar la voz. Nacida en Texas en el seno de una familia siria, se crio entre Dubai y Estados Unidos, por lo que su perspectiva está marcada por la multiculturalidad.

Estudió diseño en la Universidad Virginia Commonwealth antes de obtener su doctorado en ilustración en la Escuela de Artes Visuales de Nueva York. Su arte es personal, conmovedor y con una gran carga política: una exploración de la herencia, la identidad y la resistencia silenciosa.

Ha creado ilustraciones que exploran y celebran las experiencias femeninas a través de su arte, desde lo aparentemente cotidiano como leer y tocar música hasta mujeres que se rebelan contra la tiranía y asesinatos sin resolver en Yemen. En declaraciones recogidas por CNN, explicó: «Lo único que puedo hacer es usar mi voz para denunciar lo que ocurre en Estados Unidos, Palestina y Siria tanto como pueda».

Una de sus obras más aplaudidas como controvertidas fue la que visibilizó la experiencia de Reem Ahmed, una arquitecta de Gaza que quedó atrapada bajo los escombros de su casa durante 12 horas tras un ataque aéreo israelí que acabó con la vida de varios miembros de su familia. Ella misma explica que crea «imágenes de mujeres de color en espacios de sanación, narra sus historias a través del retrato en blanco y negro y el simbolismo».

«Actualmente, me centro en crear arte sobre mis experiencias y las cosas que me importan, y la comunidad que se forma a partir de las conversaciones sobre mi trabajo —tanto en línea como en persona— surge de forma natural», declaró a la publicación YUNG en una entrevista concedida el pasado mes de abril. «Creo mi obra para quienes comparten mis mismos intereses».

Y es que, a pesar de estar casada con una de las figuras políticas claves de ahora, ha optado por mantenerse en gran medida en un segundo plano. Pero ella no desea que confundan su discreción con pasividad. Pertenece a una nueva generación de artistas que transitan entre el activismo y el arte.

Su marido también ha opinado sobre su obra en varias ocasiones, sobre todo, cuando los que se oponían a su carrera política la utilizaban como arma en su contra. En una publicación de Instagram en mayo habló abiertamente sobre ella y los ataques que estaba recibiendo simplemente por ser su pareja.

«Ahora, los trolls están intentando convertir esta carrera —que debería ser sobre ti— en una carrera sobre ella», escribió. «Rama no es solo mi esposa, es una artista increíble que merece ser reconocida por méritos propios. Pueden criticar mis opiniones, pero no a mi familia», sentenció.

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