El vivero sostenible de Sandra Ortega florece: duplica ingresos y se acerca al millón de euros

La vida de Sandra Ortega no se parece en nada a la de su hermana menor Marta. Mientras que la segunda está recurrentemente expuesta como presidenta no ejecutiva de Inditex, Sandra disfruta de una vida alejada de los focos, muy al estilo de lo que siempre ha caracterizado a su padre, Amancio Ortega. A sus 57 años, es la mujer más rica de España desde que heredó las acciones de su madre Rosalía Mera, fallecida hace ya más de una década a los 69 años.

Ella es quien ha continuado con su legado, de manera discreta pero constante, con proyectos que incluyen la Fundación Paideia Galizia-creada en 1986 y que centra su trabajo en la integración y la búsqueda de igualdad de oportunidades para las personas con discapacidad- y los Viveros Borrazás, que están a punto de alcanzar el millón de euros de facturación. Ubicados en Bergondo, La Coruña, Viveros Borrazás es una empresa socialmente comprometida fundada por Rosalía Mera. Según aparece en el Registro Mercantil, la sociedad se constituyó en enero de 2003. El objeto social es la producción y comercialización de plantas y cultivos, así como actividades de creación, diseño y mantenimiento de jardines y zonas verdes.

En la página web de la empresa explican que son una compañía con casi un siglo de historia, haciendo referencia a la tradición horticultora de la zona, con siete personas en la plantilla y con la calidad en la atención al cliente como seña de identidad. Además, colaboran con la empresa de economía social Trébore Jardinería -sociedad impulsada por la Fundación Paideia- y con Cultigar, un laboratorio de biotecnología vegetal que desarrolla proyectos de I+D también presidido por Sandra Ortega. Por cierto, desde el pasado mes de octubre, la hija mayor de Amancio Ortega ha pasado a ejercer como socia única de la sociedad, de la que era administradora desde el fallecimiento de su madre.

A lo largo de los últimos años, el éxito de Viveros Borrazás se ha ido consolidando de manera sostenida. En 2022 la empresa superó por primera vez los 600.000 euros de facturación y creció un 11% con respecto al año anterior. En 2023 cerró su ejercicio fiscal con un crecimiento de casi el 38%. Esto significa que terminó el año con más de 800.000 euros de facturación, según aparece en la memoria anual de la compañía. Ha pasado de ganar poco más de 8.000 euros a casi 20.000. Estas cantidades se han destinado a reservas y han hecho que el patrimonio neto haya superado los 800.000 euros. Además, el volumen de activos de la sociedad también se ha incrementado.

Viveros Borrazás cuenta con más de 26.000 metros cuadrados de espacio abierto en Gandarío (Bergondo), en los que se pueden encontrar diferentes tipos de especies de árboles, plantas y arbustos. Algunos de ellos son ejemplares únicos, lo que convierte a la empresa en un referente en el sector. Así aparece reflejado en la página web de la compañía: «Desde nuestro nacimiento, la singularidad de nuestros productos y la excelencia de los mismos son nuestra marca e identidad. Un espacio innovador que destaca por la venta de ejemplares únicos de plantas, árboles ornamentales y frutales. Nos preocupamos por la calidad haciendo de este vivero un referente en el sector», sentencian.

La empresa no ofrece solamente la posibilidad de adquirir diferentes tipos de plantas y árboles tanto para jardines domésticos como públicos o profesionales, sino que también ofrece servicios de mantenimiento y conservación a través de Trébore Jardonería. Esta sociedad se encuentra impulsada por la Fundación Paideia y está considerada Centro Especial de Empleo por la Xunta de Galicia. Su objetivo es impulsar el empleo de personas con discapacidad o en riesgo de exclusión social. Asimismo, otro de los servicios que ofrece es el alquiler del espacio para eventos, rodajes, sesiones de fotos y otras actividades en esta línea.

Aunque Teresa Táboas no aparece directamente vinculada a la gestión de Viveros Borrazás, la exconsejera es administradora solidaria junto a Sandra de Sementares, una compañía centrada en la conservación, la clonación y la mejora de variedades tradicionales gallegas de plantas y semillas. Esta sociedad forma parte del entramado de negocios verdes ligado a la Fundación Paideia y a la fuerte apuesta de Sandra Ortega por proyectos de agricultura sostenible e investigación en este campo, entre los que se encuentran Cultigar, Trébore Jardinería o los propios Viveros Borrazás.