Pitágoras
Una antigua tablilla babilónica sugiere que Pitágoras no descubrió el famoso teorema
Un hallazgo reciente sugiere que la fórmula que se utiliza para hallar el lado que falta en un triángulo rectángulo se formuló 1.000 años antes del nacimiento del famoso matemático
Al filósofo griego Pitágoras, nacido en el año 570 a.C, se le atribuye la creación de la fórmula matemática que ayuda a encontrar el lado que falta en un triángulo rectángulo. Sin embargo, un reciente descubrimiento pone en duda su autoría e incluso se piensa que podría ser el caso de plagio más antiguo conocido en el mundo.
El matemático y doctor de Estadística Matemática y Probabilidad por la Universidad Rutgers, Bruce Ratner, fue quien encontró una «prueba concreta» en una antigua tablilla de arcilla «que indica indiscutiblemente que el Teorema de Pitágoras fue descubierto y demostrado por matemáticos babilonios 1.000 años antes de que Pitágoras naciera», sentenció Ratner en un estudio publicado en 2009 en la Revista de Orientación, Medición y Análisis de Marketing.
Un matemático descubrió una antigua tablilla babilónica con el concepto de que es anterior al nacimiento de Pitágoras en más de 1.000 años
Dicha prueba se extrajo de una tablilla de arcilla denominada YBC 7289, que data entre el 1800 y 1600 a.C. En ella aparecen principios del teorema de Pitágoras para calcular la longitud de una diagonal dentro de un rectángulo.
A través de una cuidadosa traducción desde el sistema sexagesimal utilizado por los antiguos babilonios, los investigadores descubrieron que estos antiguos matemáticos conocían no solo el teorema, sino también otros conceptos avanzados.
Esto hace pensar a los expertos que el antiguo filósofo griego pudo haber oído hablar del teorema al ser transmitido de boca en boca y más tarde popularizarlo y hacerlo suyo.
La tablilla se formó entre 1800 y 1600 a.C. En la imagen, el reverso
Otros piensan que la razón por la que el famoso teorema se le atribuyó a Pitágoras es la falta de escritos originales, así como la transmisión oral del conocimiento dentro de su escuela llamada Semicírculo de Pitágoras, desde donde se transmitía todo el aprendizaje. Muchos de sus miembros, a menudo atribuían los descubrimientos al propio Pitágoras como signo de respeto y admiración. Así, el término se arraigó y se mantuvo a lo largo de la historia, a pesar de sus raíces babilónicas mucho más antiguas.
Aunque el teorema de Pitágoras lleva el nombre de este famoso matemático griego, no fue el único que contribuyó a su desarrollo y aplicación. Los babilonios ya conocían y usaban este teorema un milenio antes, y lo más asombroso de todo es que dejaron evidencia de sus cálculos en tablillas de arcilla.