Fotografía que muestra joyas de oro encontradas en un barco español del siglo XVIII, exhibidas este miércoles en la ciudad de Mérida en el estado de Yucatán (México)
Especialistas exhiben el tesoro de un barco español del siglo XVIII descubierto en México
Los objetos están siendo estudiados por investigadores de México, España y Colombia
Un equipo conformado por especialistas de México, España y Colombia estudian un tesoro, ahora en exhibición, compuesto de joyas de oro, esmeraldas y diamantes que se encontraron en un barco español del siglo XVIII en el sureste mexicano por arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Según explicó Helena Barba, responsable de la Oficina Península de Yucatán de la Subdirección de Arqueología Subacuática (SAS) del Centro INAH Campeche, el conjunto se conoce como Tesoro de Alacranes compuesto por 420 piezas que «forman parte de una investigación interdisciplinar, donde converge el trabajo de arqueólogos, estudiosos de la joyería, gemas, metales e ingenieros».
39 pecios en el arrecife Alacranes
La arqueóloga, quien es vicepresidenta del Consejo Consultivo Científico y Técnico (STAB, por sus siglas en inglés) de la Convención de la Unesco, también ha indicado que descubrieron el tesoro en el Arrecife Alacranes de Yucatán, estado del sureste mexicano en 2018. «En los últimos 20 años hemos encontrado 39 naufragios en el arrecife Alacranes, que es una trampa para la navegación y todavía nos falta mucho, porque apenas llevamos el 5 % de exploración en ese sitio», ha añadido.
Joyas de oro encontradas en un barco español del siglo XVIII, exhibidas en la ciudad de Mérida en el estado de Yucatán
Las últimas investigaciones arrojan que es una nave del siglo XVIII «porque los clavos que estaban adheridos a la madera que ya no existe son de una alineación de cobre que se inventó y empezó a usar a finales de 1780». Una de las hipótesis indica que el barco podría ser uno de los galeones de Tierra Firme que comunicaron a España con el virreinato del Perú.
«Lo que más resalta de ese naufragio es su tesoro, que apenas es el 1 % del cargamento que seguramente estará en la parte del arrecife que hoy está plagado de corales de fuego y permanecerá así el resto de su vida material», ha indicado Barba. La carga, agrega la arqueóloga, «literalmente es un tesoro, pero no solo por el oro, esmeraldas y diamantes, sino porque habla de la vida cotidiana del comercio y rutas navales del siglo XVIII, algo difícil de encontrar en un naufragio».
Gracias a la investigación internacional, el INAH concluye que el oro es de 24 quilates, por lo que su procedencia puede ser de Colombia, Venezuela, Panamá o de Oaxaca, estado del sur de México, mientras que los diamantes quizá sean de Brasil.
La colección, que incluye anillos, medallas, relicarios, rosarios, botones, hebillas de zapatos, mancuernillas y 15 mondadientes de oro, esmeraldas y diamantes, está ahora en la muestra permanente El tesoro de Alacranes en el Museo de Arqueología Subacuática El Fuerte de San José El Alto en Campeche, estado del sureste mexicano.
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