'El 2 de mayo de 1808 en Madrid' o 'La Carga de los Mamelucos' de Goya
La guerra más larga de la historia de España enfrentó a un pueblo de Granada contra Dinamarca durante 172 años
El conflicto nació en plena era napoleónica y se mantuvo sin resolverse hasta que un archivero redescubrió la declaración de guerra en 1981
En noviembre de 1809, el pequeño pueblo de Huéscar (Granada) declaró la guerra a Dinamarca. Este enfrentamiento, que comenzó dentro del contexto de las guerras napoleónicas, no terminó hasta 1981, cuando se firmó la declaración de paz casi dos siglos después.
Esta guerra, considerada una de las más largas en la historia de España, no dejó muertos en ninguno de los dos bandos. De hecho, se olvidó por completo la existencia de este conflicto hasta que el investigador Vicente González Barberán descubrió, en agosto de 1981, un documento donde el pueblo granadino había declarado la guerra a la monarquía más antigua de Europa.
¿Cuál fue el motivo?
Para entender este peculiar episodio, hay que remontarse a 1807, cuando España aún era aliada de Napoleón. Aquel año, 13.355 soldados españoles llegaron a Dinamarca con la misión de proteger las costas danesas de posibles desembarcos británicos, según recoge el portal del Ayuntamiento de Huéscar. Sin embargo, un año más tarde, el emperador francés rompió la alianza con España, ocupando Madrid en su camino hacia Portugal.
Este cambio de alianzas obligó a una rápida huida por parte del ejército español de Dinamarca. Durante su huida, 5.000 soldados fueron hechos prisioneros. Asimismo, a raíz del levantamiento en Madrid, numerosas ciudades se gestionaron a través de Juntas Provinciales, que se encargaron de organizar la guerra contra el invasor.
De esta manera, el 11 de noviembre de 1809, llegó a Huéscar un emisario militar español con una Real Orden de parte de las Cortes, que actuaban en nombre de Fernando VII, rey que había sido desterrado por Napoleón. Dicho documento instaba a romper toda relación diplomática con el país nórdico, por lo que el Ayuntamiento de la localidad granadina acordó, en una sesión plenaria, declarar la guerra a Dinamarca. La resolución establecía lo siguiente:
«[…] atacar a las fuerzas danesas en cualquier parte que se hallen, vengar los insultos recibidos y no cesar las hostilidades hasta que un mutuo convenido de Corte a Corte y un tratado estipule las condiciones de paz».
La tregua llegaría en 1814, cuando se firmó el Tratado de París que puso fin a las guerras napoleónicas, pero en Huéscar nadie se acordó de registrarlo, por lo que el litigio se mantuvo y la lucha quedó en el olvido hasta junio de 1981, cuando el archivero municipal Vicente González Barberán descubrió entre los papeles del archivo este llamativo suceso de la historia de España.
Atónito, después de descubrir que el municipio granadino estaba en guerra desde 1809, González Barberán decidió solventar la situación con la declaración oficial de paz con Dinamarca.
Cientos de daneses invaden Huéscar para celebrar el día de la paz, el 11 de noviembre de 1981, en una imagen de 'Granada hoy' compartida por el Archivo Municipal del pueblo granadino
Según indica el Ayuntamiento de Huéscar, «para firmar la paz, seis autobuses cargados con 300 daneses, algunos vestidos de vikingos, desembarcaron en la localidad granadina. Allí, los recibió un enorme cartel con un mensaje en danés antiguo: ‘Atención, daneses, estáis entrando en territorio enemigo. Si dais un paso más, ateneos a las consecuencias’».
La consecuencia fue que los casi 10.000 habitantes del pueblo se echaron a la calle, colocaron dos tinajas gigantes de vino en la plaza y los daneses fueron agasajados con platos de la zona, como chuletas de cordero, morcilla, pipirrana y remojón de San Antón, detalla el portal oficial del Ayuntamiento.
Así, tras 172 años de conflicto abierto, «daneses y oscenses sellaron la paz en una ceremonia berlanguiana, en la que también participaron el embajador danés, Mogens Wandel-Petersen, y el alcalde de Huéscar, José Pablo Serrano».