El ministro ruso de Exteriores, Sergéi Lavrov
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Rusia sólo aceptará la paz en Ucrania si instituye un nuevo orden mundial, advierte Lavrov
El ministro de Exteriores de Rusia, Sergéi Lavrov, negó que Rusia rechace una salida negociada a la guerra en Ucrania, acusó a Estados Unidos y a la OTAN de impedir que Kiev se siente a negociar y aseguró que, tras Rusia, el siguiente objetivo de Occidente será China.
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En una comparecencia ante los medios de comunicación tras reunirse en Ankara con su homólogo turco, Sergéi Lavrov firmó que la paz es posible, pero sólo si se construye un «nuevo orden mundial» en el que se de respuesta a los «justos intereses de Rusia».
Los «justos intereses» a los que hizo referencia Lavrov pasarían por la retirada de la OTAN en el este de Europa y el reconocimiento internacional de las anexiones territoriales de Rusia en Ucrania.
Además, en el nuevo orden mundial defendido por Lavrov, el papel de Estados Unidos quedaría reducido al de una potencia de segunda y la hegemonía pasaría a manos de Rusia y China.
Lavrov justificó sus pretensiones como respuesta a la hegemonía actual de Estados Unidos: «Estados Unidos quiere ser hegemónico e imponer su posición a todos. Quieren un nuevo orden mundial unilateral», denunció.
En ese sentido, afirmó que las negociaciones para la paz en Ucrania «son posibles si se tienen en cuenta nuestros justos intereses».
La reunión entre Lavrov y el ministro turco de Exteriores, Mevlüt Çavusoglu, tuvo como punto central la prórroga del acuerdo sobre exportación de cereales de Ucrania en el mar Negro.
Lavrov dio a entender que Rusia podría retirarse del acuerdo si occidente no retira las restricciones a los cereales y fertilizantes rusos: «No están en la lista de sanciones», aseguró Lavrov, «pero los países occidentales nos impiden exportarlos. Estamos hartos, si no se levantan esos obstáculos a las exportaciones de fertilizantes y cereales rusos, nos plantearemos si realmente es necesario ese acuerdo».
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