El Rey de Marruecos, Mohamed VI
¿Dónde está Mohamed VI? El gran desaparecido durante el terremoto que asola a Marruecos
El país norteafricano sufre una de las peores catástrofes de su historia, mientras se espera que el monarca alauí se pronuncie sobre los hechos
mientras que Marruecos vive uno de sus peores episodios en la historia, el hombre fuerte del país, el Rey Mohamed VI se encontraba en uno de sus destinos predilectas donde pasar unos días de desconexión al margen del bullicio y las responsabilidades palaciegas. El monarca alauí se ha refugiado en Francia, precisamente en París, en su palacete a las orillas del río Sena y a las faldas de la Torre Eiffel, según han indicado varios medios africanos.
El silencio de Mohamed VI, a la hora de escribir estas líneas, es, ante todo, sorprendente. Según los últimos datos ofrecidos por el Ministerio del Interior marroquí, ya son más de mil las personas muertas y mil los heridos. El terremoto, el peor sufrido en el país norteafricano, tuvo lugar a las 23:11 de la noche del viernes. Más de 12 horas han pasado desde que se sintiera el primer temblor en Ighil, sur del país, a apenas 72 kilómetros al suroeste de Marrakech.
Aún así, Mohamed VI hasta bien entrada la tarde de este sábado permanecía desaparecido. Mientras que los líderes de todas partes del globo han reaccionado a la catástrofe, desde el presidente en funciones, Pedro Sánchez, hasta su homólogo ruso, Vladimir Putin, o incluso el líder francés, Emmanuel Macron, país donde, según apuntan medios bien informados, se encontraba el monarca alauí.
Según ha hecho público el medio en francés, Afrik , el mismo que reveló hace unos meses que el Rey de Marruecos sufría sarcoidosis, este estaría en la capital francesa sometiéndose a una nueva operación de corazón. 16 horas más tarde, el medio marroquí Rue20 ha informado de que el avión real que transportaba a Mohamed VI ha aterrizado en Rabat, procedente, efectivamente, de París.
Las reacciones al terremoto no se han hecho esperar y ya han salido los primeros críticos a la gestión. El periodista marroquí independiente Ali Lmrabet ha explicado, en su cuenta de X –antes Twitter–, que en términos de vidas humanas «son sobre todo los campesinos pobres de la gran región montañosa alrededor de Marrakech los que han sufrido».
El periodista continúa diciendo que la destrucción ha sido de tal gravedad por culpa de «materiales que nos respetan las normas obligatorias» y con los que están construidos gran parte de los edificios, como las medinas de los alrededores de Marrakech. Ali Lmrabet apela al Rey de Marruecos y le insta a abandonar sus vacaciones y regresar a su país para hacer frente a «las legítimas aprensiones de su 'querido pueblo'».
El comunicador rememora otro terrible incidente, el seísmo de Alhucemas de 2004, para que no se vuelven a repetir los mismos errores, «cuando el primer ministro de entonces, Driss Jettou, no tuvo a bien viajar al área del Rif». Al contrario, Mohamed VI sí se desplazó en 2004 al epicentro de la catástrofe. Eso sí, seis días después de sentirse el primer temblor.
Felipe VI, ante el terremoto
La Casa Real española, con el Rey Felipe VI a la cabeza, ha intentado comunicarse con su homólogo marroquí, para expresarle el «más profundo sentimiento de dolor» de los españoles por el «violento» terremoto.
Según ha informado la Casa Real, el jefe del Estado español se ha puesto en contacto con Mohamed VI a través de un telegrama en el que se dirige al monarca alauí como «majestad» y «querido hermano» y le transmite su pesar por esta tragedia.
«Estoy desolado al recibir la noticia del violento terremoto que ha afectado a la localidad de Ighil y al suroeste de vuestro país y que ha causado un elevadísimo número de víctimas mortales y heridos y deseo haceros llegar, en mi nombre, en el del Gobierno y en el del pueblo español, nuestro más profundo sentimiento de dolor por las terribles consecuencias de este desastre así como nuestras condolencias más sentidas», se puede leer en el escrito.
La misiva termina diciendo que la Reina Letizia se une a él para expresar su «solidaridad más sincera con el querido pueblo marroquí» y su «apoyo, aprecio y cercanía a las familias de las víctimas en estos momentos de duelo e incertidumbre», junto con sus «mejores deseos para una pronta y completa recuperación de todos los heridos».
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