China repatría a 164 ciudadanos desde Laos para enjuiciarlos por fraude electrónico
China
Pekín exhibe su largo brazo y repatría desde Laos a 164 ciudadanos chinos acusados de «fraude»
Human Rights Watch ha alertado que tras el «absolutismo autoritario que ha devastado a Hong Kong, China está intentando extender su poder dictatorial más allá de sus fronteras»
Un total de 164 ciudadanos chinos «sospechosos» de delitos relacionados con «fraudes en telecomunicaciones» fueron repatriados a China desde Laos este lunes en una demostración masiva sin precedentes del alcance transfronterizo del régimen de Pekín.
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Un vuelo fletado aterrizó con 92 sospechosos en el aeropuerto internacional Zhengzhou Xinzheng la tarde del lunes. Ese mismo día, otros dos vuelos con 72 ciudadanos chinos aterrizó en el aeropuerto internacional Shijiazhuang Zhengding y en el aeropuerto internacional Chongqing Jiangbei procedentes de Laos.
China repatría a 164 ciudadanos desde Laos para enjuiciarlos por fraude electrónico
Además de los 15 «sospechosos de delitos» devueltos previamente a China por los órganos de seguridad pública de Anhui, un total de 179 «sospechosos de fraude de telecomunicaciones» detenidos mediante la cooperación policial entre la policía china y laosiana han sido devueltos a China, según detalla el medio estatal chino Global Times.
«Para desmantelar decisivamente los refugios de fraude» en Laos, agrega el Global Times, en julio el Ministerio de Seguridad Pública de China envió agentes de policía de Hebei, Anhui, Henan, Chongqing y otros órganos de seguridad pública a Laos, donde «cooperaron con la policía laosiana para combatir Fraude de telecomunicaciones transfronterizo».
Lo que a simple vista podría verse como la búsqueda de la verdad y la justicia mediante la cooperación policial internacional podría enmascarar la criminalización de activistas en redes sociales y la «exportación del autoritarismo» de Pekín basado en acusaciones falsas y delitos inexistentes como ya lo han denunciado organismos de derechos humanos.
El pasado julio, Human Rights Watch denunció que las autoridades de Hong Kong emitieron órdenes de arresto infundadas y ofrecieron recompensas de hasta 128,000 dólares por ocho activistas pro democracia y exlegisladores exiliados.
«Esto demuestra claramente cómo China está llevando a cabo una campaña de intimidación política más allá de sus fronteras» señaló en ese momento la oenegé.
Human Rights Watch también apuntó que «este absolutismo autoritario ha devastado a Hong Kong en los últimos tres años... y ahora están intentando extender su poder dictatorial más allá de sus fronteras».
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