Los familiares de los rehenes israelíes los reciben en Tel Aviv, Israel
Hamás e Israel negocian la liberación de otros 50 rehenes con la mediación de Egipto y Qatar
israel y Hamás, con la mediación de Egipto y Qatar estarían en negociaciones muy avanzadas para liberar a otros 50 rehenes de doble nacionalidad, en manos de la organización terrorista en la Franja de Gaza, desde el pasado 7 de octubre, según ha adelantado el medio israelí The Times of Israel.
Las conversaciones avanzaron en los dos últimos días antes de llegar a un punto muerto el lunes, afirmó un alto funcionario israelí, confirmando una noticia anterior de The Wall Street Journal, que informaba de que Hamás había empezado a condicionar la liberación de 50 rehenes a que Israel permitiera la entrada de combustible en Gaza.
El país hebreo se ha opuesto a esta exigencia, afirmando que sólo permitirá la entrada de combustible en Gaza si se libera a los aproximadamente 220 rehenes, según ha revelado el WSJ. Asimismo, no se cree que todos los rehenes estén en manos de Hamás, ya que la Yihad Islámica Palestina también ha afirmado que tiene retenidas a 30 personas.
Por su parte, la ONU alegó el lunes que a la agencia sólo le quedan tres días de combustible para sus camiones. Además, los hospitales de Gaza también luchan por mantener en funcionamiento los generadores que alimentan los equipos médicos vitales y las incubadoras para bebés prematuros.
Sin embargo, Israel tiene la certeza de que todo el combustible será requisado por Hamás para utilizarlo con fines militares, mientras el Estado judío se prepara para invadir el territorio y eliminar al grupo terrorista.
A esto se suma el miedo por que Hamás cumpla su amenaza de ejecutar a los rehenes si Israel continúa sus bombardeos aéreos sobre Gaza.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente estadounidense, Joe Biden, hablaron de la crisis de los rehenes en una llamada telefónica el lunes, durante la cual Biden se congratuló de la liberación de una segunda pareja de cautivos de Gaza horas antes.
Biden «reafirmó su compromiso con los esfuerzos en curso para asegurar la liberación de todos los rehenes restantes tomados por Hamás –incluidos diez estadounidenses– y para proporcionar un paso seguro a los ciudadanos estadounidenses y otros civiles en Gaza», señaló la Casa Blanca en un comunicado.
El presidente estadounidense «también subrayó la necesidad de mantener un flujo continuo de ayuda humanitaria que se necesita urgentemente en Gaza; puso al día al primer ministro sobre el apoyo de EE.UU. a Israel y los esfuerzos en curso para la disuasión regional, para incluir nuevos despliegues militares de EE.UU.», dijo la Casa Blanca.
Las dos rehenes liberadas el lunes por la noche tras 17 días de cautiverio, Nurit Cooper, de 79 años, y Yocheved Lifshitz, de 85, fueron liberadas de Gaza a Egipto a última hora del lunes, y posteriormente fueron trasladadas a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), que las llevaron a un hospital israelí para examinarlas.
Israel agradeció tanto a Egipto como a la Cruz Roja su papel en la liberación y traslado de Lifshitz y Cooper, y prometió «seguir trabajando al máximo de nuestras posibilidades y con todo nuestro empeño para localizar a todos los desaparecidos y traer a casa a todos los rehenes».
El portavoz del ala militar de Hamás, las Brigadas Izz ad-Din al-Qassam, declaró que el grupo terrorista había liberado a los dos rehenes israelíes por «razones humanitarias», tras la mediación de Egipto y Qatar.
El sábado, Abu Obeida afirmó que el grupo terrorista quería liberar a los mismos dos rehenes, pero que Israel se negó a aceptarlos. Tras la afirmación, la oficina de Netanyahu dijo que no respondería a «las mentiras propagandísticas de Hamás».
No hubo ninguna indicación inmediata de por qué Cooper y Lifshitz fueron seleccionados para su liberación, aparte de su avanzada edad y posibles complicaciones de salud. La hija de Lifshitz, Sharone, había revelado que su madre utiliza oxígeno cuando duerme y sufre importantes dolores de espalda. El hijo de Cooper, Rotem, había declarado a una cadena de televisión local estadounidense que «podrían no sobrevivir si no reciben sus medicinas».
Ninguno de los dos tenía doble nacionalidad, como Judith Raanan y su hija Natalie, que fueron las dos primeras rehenes liberadas el viernes.
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