China «no tolerará» que países logren acuerdos comerciales con Trump que perjudiquen sus intereses

El Gobierno de China ha expresado este lunes su firme rechazo a cualquier acuerdo internacional que se establezca en detrimento de sus intereses, advirtiendo que no aceptará imposiciones que vulneren su soberanía económica. Esta declaración se produce tras reportes de medios internacionales que apuntan a una estrategia del presidente estadounidense, Donald Trump, consistente en presionar a otros países para que reduzcan sus lazos comerciales con China durante negociaciones bilaterales.

A través de un comunicado publicado en su página web oficial, el Ministerio de Comercio chino acusó a Estados Unidos de abusar sistemáticamente del uso de aranceles, justificándolos bajo el principio de «reciprocidad». Según el organismo, Washington ha forzado a sus socios a sentarse a negociar bajo presión, distorsionando el equilibrio necesario en cualquier proceso de diálogo comercial.

«China valora los esfuerzos multilaterales por resolver disputas económicas mediante el diálogo equitativo, pero dichos esfuerzos deben realizarse sobre la base de la justicia, el respeto mutuo y la legalidad internacional», remarcó el Ministerio. Asimismo, instó a todas las partes implicadas a preservar las normas que rigen el comercio global y el sistema multilateral, frente a lo que considera una deriva proteccionista de EE.UU.

El comunicado criticó también la búsqueda de ventajas comerciales temporales a costa del perjuicio de terceros, calificando dicha actitud como cortoplacista y perjudicial para el orden económico global. En este sentido, alertó de que el unilateralismo y el proteccionismo representan amenazas que impactan a todos los países, ya que promueven un entorno comercial dominado por la ley del más fuerte.

«Una vez que el comercio internacional cae en una lógica de confrontación donde prevalece la fuerza sobre el derecho, ningún país puede escapar a sus consecuencias», subrayó el comunicado.

Además, el Gobierno chino se comprometió a reforzar la cooperación con otros actores internacionales para hacer frente, de forma conjunta, a lo que considera una estrategia de intimidación económica por parte de EE.UU. «La unidad y la coordinación son claves para frenar estos abusos unilaterales», insistió.

Las tensiones comerciales entre ambas potencias escalaron especialmente el 2 de abril, cuando la Administración Trump anunció aranceles «recíprocos» a nivel global. Aunque posteriormente relajó algunas medidas ante la reacción negativa de los mercados y el encarecimiento de su deuda, endureció su postura frente a China, elevando sus aranceles hasta un 245 % en represalia por las contramedidas adoptadas por Pekín, que, por su parte, incrementó los suyos hasta un 125 % sobre bienes estadounidenses.

A pesar de esta escalada, Trump afirmó recientemente que espera alcanzar acuerdos arancelarios con varios socios comerciales en pocas semanas y reveló que ya hay contactos con representantes chinos. No obstante, desde Pekín se insiste en que cualquier negociación debe regirse por el principio del respeto mutuo y que, aunque se mantiene abierta la vía del diálogo, este solo será viable si se da en condiciones de igualdad.