
Merz saluda a Thorsten Frei, nuevo ministro de la Cancillería
El nuevo Gobierno alemán termina de coger forma: así queda el reparto de ministerios
A democristianos y socialdemócratas les corresponde seis ministerios a cada uno, mientras que la CSU se ocupará de tres
Hace un par de semanas, mes y medio después de las elecciones, se formó el nuevo Gobierno en Alemania cuando los vencedores de las elecciones, la Unión Democristiana —hermanada con la Unión Socialcristiana de Baviera—, llegó a un acuerdo con el Partido Socialdemócrata —los anteriores líderes del Ejecutivo— para formar un Gobierno de coalición.
Aunque todavía queda una semana para que el nuevo canciller, Friedrich Merz, sea oficialmente investido en el Bundestag como sucesor de Olaf Scholz, los detalles sobre cómo será la formación del próximo Ejecutivo van quedando más claros. A pesar de ser los claros perdedores de las elecciones, los socialdemócratas han logrado hacerse con tres ministerios clave: Finanzas, Justicia y Defensa. Los democristianos ocuparán el Ministerio del Interior y el de Asuntos Exteriores, que lo recuperan por primera vez en casi 60 años. A democristianos y socialdemócratas les corresponde seis ministerios a cada uno, mientras que la CSU se ocupará de tres.
Los socialdemócratas todavía no han anunciado su lista de ministros para el futuro Gobierno, pero los democristianos ya han dado a conocer los nombres de los nuevos integrantes del mismo. Concretamente, Thorsten Frei será el ministro de la Cancillería; Katherina Reiche estará al frente de la cartera de Economía; Johann Wadephul, en el Ministerio de Exteriores; Karin Prien, en Educación y Familia; Nina Warken, en Sanidad; Patrick Schnieder, en Transporte, y Karsten Wildberger, en Asuntos Digitales.
La CSU, por su parte, ha designado a Alexander Dobrint para liderar el Ministerio del Interior y con ello el endurecimiento de la política migratoria; Dorothe Baar, el de Investigación, Tecnología y Espacio, y Alois Rainer, el de Agricultura.
Primeras críticas a Merz
Merz defendió este lunes la reforma constitucional para aumentar el gasto en Defensa, que representa un cambio esencial con respecto a lo que él había dicho durante la campaña, aludiendo a la situación en Europa, a la guerra de Ucrania y al resquebrajamiento de la relación con Estados Unidos, y que ha levantado las primeras críticas desde la oposición.
Además, el próximo canciller celebró que la próxima semana «Alemania tendrá otra vez un Gobierno con capacidad de maniobra y mayoría parlamentaria con el que podremos resolver paso a paso los problemas de nuestro país». «No se trata sólo de nosotros o del partido. Se trata del futuro de nuestro país. Asumo esta tarea y cuento con el apoyo de mi partido al que pertenezco desde hace más de cincuenta años», dijo.
Con respecto a uno de los temas claves de su campaña, la lucha contra la inmigración irregular, Merz dijo que Alemania no seguirá siendo el freno para las soluciones de ese problema en Europa sino que trabajará por resolverlo. «Sabemos que tenemos la obligación de tener éxito en Alemania, en Europa y en el mundo. Éxito para la economía, la sociedad en nuestro país y éxito para el centro democrático», aseguró.