Fundado en 1910
Miembros de las fuerzas de seguridad detienen a un manifestante durante una manifestación juvenil en Rabat

Miembros de las fuerzas de seguridad detienen a un manifestante durante una manifestación juvenil en RabatAFP

Las razones por las que los jóvenes se echan a la calle contra el régimen de Marruecos

Las principales ciudades del país vecino han protagonizado manifestaciones al grito de «la salud es lo primero, no queremos el Mundial»

La juventud de Marruecos se ha plantado ante la corrupción, la crisis económica, la precariedad de los servicios básicos y la falta de oportunidades, y se ha echado a las calles a protestar contra el régimen que reina con puño de hierro Mohamed VI. «La salud es lo primero, no queremos el Mundial» son algunos de los lemas que corean los marroquíes estos días en las principales ciudades del país norteafricano, como Rabat, Marrakech, Casablanca, Tánger o Agadir. Durante cuatro días consecutivos, miles de jóvenes han desafiado a las fuerzas de seguridad del país, que tratan de reprimir con dureza las manifestaciones, para exigir mejoras en educación y salud.

Este mismo lunes, al menos 60 personas fueron detenidas tan solo en Rabat en el marco de las manifestaciones convocadas anónimamente a través de redes sociales como Discord. A estos arrestos se suman muchos más que tuvieron lugar el pasado fin de semana, mientras la Policía marroquí evita dar cifras exactas. Además, la Monarquía alauí ha decretado la prohibición de todas aquellas reuniones convocadas de manera anónima para evitar revivir los peores fantasmas de las Primaveras Árabes de 2011.

Las concentraciones fueron convocadas la semana pasada por dos colectivos anónimos que se identifican como Morocco Youth Voice y GenZ212, y exigen reformas inmediatas en los sistemas de educación y salud, así como una mayor oferta de empleo para los jóvenes. Asimismo, los jóvenes, cuyo índice de desempleo en la franja de los 15 a los 24 años alcanza un sangrante 36 %, han alzado la voz contra los gastos exorbitantes en nuevas infraestructuras deportivas para la Copa Mundial de Fútbol de 2030, que también se celebrará en España y Portugal.

Por ello, en los eslóganes y carteles que se han visto estos días en las calles de las principales ciudades del país vecino se observan referencias al evento deportivo, que ha sido la última gota que ha colmado la paciencia de sus ciudadanos. «¡Menos estadios, más hospitales!» o «Al menos en el estadio de la FIFA tendremos un kit de emergencia, nuestros hospitales no», claman los jóvenes. El movimiento GenZ212, que debe su nombre al código internacional de Marruecos (+212), ya ha anunciado más concentraciones, a pesar de las amenazas y prohibiciones de las autoridades.

En sus redes sociales, GenZ212 se presenta como «un poderoso movimiento juvenil por el cambio». La organización se define como «una nueva ola de activismo en Marruecos, impulsada por jóvenes que exigen un cambio» y se «ha convertido en la voz de una generación que se siente olvidada por sus líderes». «Una de las principales críticas del movimiento es la decisión del Gobierno de centrarse en proyectos de infraestructura a gran escala, como la construcción de estadios deportivos y la preparación de eventos internacionales como la Copa Mundial de la FIFA 2030, mientras las necesidades básicas de los ciudadanos siguen sin satisfacerse», denuncia el colectivo en su página oficial.

Las protestas han dado lugar a un eslogan que se ha convertido en sinónimo de la causa de GenZ212: «Hay estadios, pero ¿dónde están los hospitales?». El movimiento explica que estos jóvenes marroquíes no solo exigen cambios estructurales para el país, «sino que están pasando a la acción. Se organizan en línea, utilizando plataformas de redes sociales como Instagram, TikTok y Twitter para difundir su mensaje y unir a sus seguidores».

La muerte de ocho mujeres en tan solo una semana, que se habían sometido a una cesárea –una intervención que no entraña una gran complejidad– en el hospital regional Hassan II de Agadir, fue la llama que terminó de prender la mecha. Según publicó el medio Maghreb Times, la causa más probable del fallecimiento fue la mala aplicación del halotano, un anestésico que podría haber estado defectuoso al no respetar debidamente la cadena de refrigeración. Al no surtir efecto el fármaco, los médicos habrían suministrado a las pacientes el doble de la dosis prevista, provocando su muerte. Los pasados 10 y 15 de septiembre, vecinos de Agadir ya se concentraron frente al hospital para denunciar la precaria situación en la que se encuentra el Hassan II, por la falta de personal, el hacinamiento de pacientes y los equipos médicos dañados.

Para aplacar las protestas, los partidos que conforman la coalición gubernamental en Marruecos emitieron un comunicado conjunto en el que expresan su disposición al diálogo. «Tras analizar las diversas manifestaciones juveniles en espacios electrónicos y públicos, el Gobierno reafirma su buena escucha y comprensión de las demandas sociales, así como su disposición a una respuesta positiva y responsable», aclaran en el escrito.

comentarios
tracking

Compartir

Herramientas