Policías vigilan una calle durante una manifestación liderada por jóvenes en Salé, Marruecos
La Gendarmería marroquí alega legítima defensa para justificar la muerte de tres jóvenes
La manifestaciones de la generación Z que comenzaron como una llamada de atención a la clase gobernante del país por la deficiencia en los servicios básicos se han saldado, por el momento, con cerca de 300 heridos y 400 arrestos
Las protestas juveniles, lideradas por la conocida como generación Z —aquellos que comprenden las edades de entre 13 y 28 años— y que empezaron como un movimiento pacífico para reclamar a las élites del país de Mohamed VI una mayor y mejor inversión en servicios básicos como la educación y la sanidad, se han ido tornando durante las dos últimas jornadas en violencia callejera. En la madrugada de este miércoles, en el poblado de Leqliaa, los enfrentamientos entre manifestantes y la Gendarmería Real se han cobrado ya la vida de tres jóvenes.
Los fallecidos fueron alcanzados por fuego real de las autoridades, que están dispuestas a todo para poner fin a esta revuelta social que, aunque no es multitudinaria, sí pone contra las cuerdas a la clase gobernante del país, incluido al monarca alauí. Ante la consternación que han provocado estas tres muertes en el marco de las manifestaciones, la Gendarmería Real alegó, a través de un comunicado emitido esta misma mañana y difundido por la agencia de noticias oficial del reino MAP, que había actuado en «legítima defensa».
«Los efectivos de la Gendarmería de Leqliaa se vieron obligados a usar sus armas de servicio en la noche del miércoles 1 de octubre de 2025 en legítima defensa para repeler un ataque y asalto a una comisaría de la Gendarmería Real», se justifican en la nota. Así, las autoridades aseguran que los fallecidos, junto a otros grupos de personas, estaban provocando disturbios, además de apedrear y asaltar una comisaría y, según las mismas fuentes, lograron incluso incautarse de un vehículo policial y cuatro motos.
«Los atacantes, reforzados por un numeroso grupo de alborotadores, atacaron de nuevo el puesto de la Gendarmería Real, armados con armas blancas», afirman las autoridades locales. Las manifestaciones juveniles, convocadas de forma pacífica a través de un canal en la red social Discord, se han ido volviendo más violentas, sobre todo durante las dos últimas noches. En la capital, Rabat, los disturbios se trasladaron a la cercana ciudad de Salé, donde vecinos confirman a El Debate que durante la madrugada se vivieron momentos tensos entre los manifestantes y la Policía. Escenas similares se repitieron en otras urbes a lo largo del país, como Tánger (norte) o Tarudant (sur).
Un banco incendiado durante una manifestación juvenil en Salé, Marruecos
Hasta el momento, las protestas se han saldado con cerca de 300 heridos y 400 arrestos. A estas cifras hay que sumar los tres fallecidos en las últimas horas, algo que no hará más que inflamar a los jóvenes que desafiaron a las autoridades marroquíes reclamando únicamente una mejora en los servicios básicos. Aunque las protestas han provocado que la coalición de Gobierno de Marruecos se haya mostrado dispuesta al diálogo, lejos de moderarse, la violencia ha secuestrado sus reclamaciones y las autoridades marroquíes no están dispuestas a permitir, bajo ningún concepto, que la situación se salga de control.