Dos ruedas
No busques en el diccionario de la Real Academia de la Lengua(RAE) el término motochorro, porque no está admitido… todavía. Se trata de un término que salió de la jerga policial en la primera década de los 2000 para instalarse en el lenguaje coloquial de algunos países sudamericanos.
Desde allí se ha ido extendiendo rápidamente junto a la actividad que representa este término, cada vez más habitual en el mundo del hampa.
En España haría referencia a los tradicionales tironeros de los años 80 y 90, aunque en este caso han sustituido las vetustas vespinos y el Seat 1430 de la época por motos de mayor potencia que les permiten huir del lugar de los hechos a gran velocidad, de ahí el calificativo de motochorro.
Inicialmente utilizado en Chile, Argentina, Uruguay, Brasil y Paraguay, el término saltó a los medios en 2014, cuando en un documental argentino se emitió un vídeo grabado por un turista canadiense en el que se podía ver al motochorro que le asaltó y le robó.
Actualmente se trata de una actividad habitual en calles céntricas y frecuentadas por turistas. La moto cuenta siempre con dos ocupantes, uno se encarga de conducir mientras su socio se hace con las pertenencias de la víctima a la que han decidido robar la cartera, el teléfono móvil o lo que sea.
En ocasiones cuentan con un tercer 'socio' que va a pie y que se encarga de seleccionar y marcar discretamente para que sus compañeros en la moto le quiten las pertenencias de la manera más rápida y posible.
Las redes sociales están infestadas de vídeos de esta actividad, que en numerosas ocasiones acaban muy mal, pues algunos conductores en coche se toman la justicia por su mano y llegan a atropellarlos o se da comienzo a un tiroteo.
Comentarios