El automóvil forma parte de la esfera privada de una persona, por lo que legalmente no es sencillo prohibir fumar
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La nueva ley antitabaco prohíbe también fumar en el coche: así funcionará
Hasta ahora la DGT proponía sancionar a los conductores por no mantener la atención sobre la conducción al encender o apagar un cigarrillo
Tras años en el aire finalmente el Consejo de Ministros aprobaba hace unas horas la modificación de la ley del tabaco, un anteproyecto que aún tendrá que ser ratificado por el Congreso y que aumenta las limitaciones al consumo de cigarrillos tradicionales y electrónicos.
Más allá de las marquesinas de autobús o las terrazas de los bares, la nueva ley contiene un apartado que va a prohibir fumar en los automóviles, aunque solo en casos determinados.
Fumando no espero...
En condiciones normales la jurisprudencia tiende a considerar los automóviles como un área privada del propietario o del conductor, con lo cual resulta básicamente imposible prohibirle fumar genéricamente, pues sería como prohibirles fumar en su domicilio.
Hasta ahora la clave estaba en encender un cigarrillo
Actualmente lo que se hace y se aplica en las carreteras es que la DGT puede sancionarte si el agente valora que el hecho de fumar o encenderte un cigarrillo ha obligado al conductor a retirar la atención de la carretera, en cuyo caso se sanciona con 200 euros, como cualquier otra distracción.
Pérdida de atención
A partir de que se apruebe la nueva ley antitabaco, lo que se prohibirá es fumar en los automóviles cuando tienen consideración de centros de trabajo, es decir cuando se trata de una furgoneta de reparto o de un vehículo de un equipo de comerciales que se dirijan a una reunión o similar, es decir todas las circunstancias en las que el uso de un vehículo es equiparable al de una oficina móvil.
Estará prohibido fumar en furgonetas de reparto por ejemplo
Se trata de una barrera muy sutil que va a complicar mucho el trabajo de los agentes, pues no es sencillo diferenciar si en un momento determinado un coche tiene consideración de centro laboral o no, y tampoco aclara si el conductor puede fumar en caso de que vaya solo en el vehículo.
El Gobierno equipara también el vapeo y el uso de cigarrillos electrónicos, que tampoco podrán consumirse en este tipo de vehículos. De acuerdo con los datos que maneja Sanidad, el tabaco está detrás del 35 % de los cánceres y es responsable directo del fallecimiento de 50.000 personas cada año.
Lógicamente hace ya tiempo que está prohibido fumar en los transportes públicos como los autobuses, el metro o un taxi.