Imagen de la página de configuración del Volkswagen golf
Mercado
Se compra un coche de 40.000 euros y no da crédito: le piden diez euros al mes por la calefacción de los asientos
La automoción está cambiando a la velocidad de la luz: los sistemas de cuota y de suscripción están a la orden del día
El automóvil está cambiando rápido, demasiado rápido para algunos, quizá la electrificación es lo que más se ve pero la digitalización del automóvil es un cambio sin precedentes que va mucho más allá de lo que parece.
En los automóviles el hardware ha perdido peso en favor del software, o lo que es lo mismo el sistema operativo de los coches y los diferentes programas que permiten el correcto funcionamiento de los coches.
Móviles con ruedas
Un cambio de paradigma absoluto, pues ahora con programación se puede controlar todo el funcionamiento de un automóvil, de hecho la revolución es tal que el sistema operativo de un coche puede actualizarse a distancia, modificando su funcionamiento por completo.
El precio de la calefacción de asientos en el Reino Unido
Como muestra, hace pocos días que Alemania bloqueaba a distancia miles de modelos de la marca Porsche en Rusia, que fueron bloqueados y no arrancan aunque los dueños tuvieran la llave y sean los propietarios legales.
Bloqueo a distancia
En este caso esta creciente informatización de los automóviles está permitiendo que los fabricantes hayan introducido el sistema de suscrición, que consiste en que deben pagar por hacer uso de determinados accesorios o funcionalidades.
Así, un comprador denuncia su sorpresa al enterarse que después de comprarse un coche de 40.000 euros, en concreto un VW Golf, tiene que pagar todos los meses por utilizar determinados accesorios, en este caso habla de los asientos calefactados, que le cuestan 9,79 euros al mes.
Estas funciones están disponibles en la web británica de la firma
Esta misma marca ofrece además opcionales por suscripción que incluyen un plus de potencia en el VW ID.3 que puede pasar de 150 kilovatios de potencia a 204 kilovatios pagando algo menos de 20 euros, en este caso hablamos de pasar de 204 caballos de potencia a 231 caballos. Afortunadamente no nos consta que la firma esté ofreciendo este tipo de servicios en España, sino que es en el Reino Unido.
Pero además de esta sobrepotencia, la marca ofrece otro tipo de opcionales de suscripción como puede ser la calefacción de los asientos, que cuesta unos 10 euros al mes, el navegador que cuesta unos 20 euros, la iluminación adaptativa Light Assist que vale en torno a los 5 euros por mes o el control de crucero adaptativo que cuesta unos 10.
¿El futuro?
Una política similar a la que ya aplican otras marcas como BMW y Mercedes, y es que al final a la marca le sale más barato configurar todos los coches igual con todos los opcionales y que posteriormente sea el propietario el que decida si quiere usarlo o no mediante un sistema de pago mensual.
Todo ello funciona mediante un sistema de actualizaciones de software OTA (Over the Air) que permite modificar el software de los coches sin que ni siquiera tenga que pasar por el taller, el funcionamiento es similar al de los teléfonos móviles.