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José Portolés

José Portolés (1959-2022)

De los estudios filológicos a los estudios del discurso

Su curiosidad intelectual, su voracidad lectora y su honestidad le permitieron ir incorporando a su tarea investigadora y docente teorías y fuentes muy distintas

José Portolés icono
Nació en Zaragoza el 7 de marzo de 1959 y falleció en Madrid el 30 de marzo de 2022

José Portolés Lázaro

Catedrático de Lengua Española de la Universidad Autónoma de Madrid

Fue un maestro en el arte de las ejemplificaciones clarificadoras, en hacer fácil lo complejo o abstruso.

Catedrático de Lengua Española en la Universidad Autónoma de Madrid, su trayectoria profesional fue fiel reflejo de los cambios y transiciones de la filología y lingüística españolas desde finales del XX hasta hoy. Su aportación científica trasciende el ámbito de lo nacional. En su formación y en su desarrollo fue capaz de incorporar lo mejor de la tradición filológica hispánica, que adquirió en las Universidades de Zaragoza y Complutense, a los planteamientos teóricos y descriptivos más actuales sobre el discurso, integrando armónicamente distintas fuentes.

Sus aportaciones más conocidas y citadas se centran en la pragmática lingüística y el análisis del discurso, particularmente en el estudio de los marcadores discursivos. Consciente de que los marcadores del discurso son unidades pobremente descritas en las gramáticas y los diccionarios del español, emprende un plan –en colaboración con otros lingüistas, como Antonio Briz y Salvador Pons, coeditores del Diccionario de partículas discursivas del español (www.dpde.es), o con María Antonia Martín Zorraquino para la Gramática descriptiva de la lengua española destinado a llenar ese vacío. Destaca, en toda su producción científica, la conexión de sus detalladas descripciones de estas piezas textuales, además de con la pragmática y el análisis del discurso, con la argumentación, la lexicografía, la enseñanza de español a extranjeros, el lenguaje periodístico o el jurídico, la censura, las nuevas tecnologías, etc.

Fue un maestro en el arte de las ejemplificaciones clarificadoras, en hacer fácil lo complejo o abstruso. Sus conocimientos de historiografía lingüística le permiten enmarcar la cuestión de la que se ocupa, por mínima y marginal que pueda parecer, en el horizonte de la comunicación. Un ejemplo de ese afán por lograr una visión integradora de todo lo que atañe al discurso, desde la partícula más periférica e inadvertida hasta la construcción textual más compleja, lo constituye su útil y compendiosa Pragmática para hispanistas (Madrid, Síntesis, 2004), obra de plena madurez, que marcó un antes y un después, y que vino a llenar –y sigue llenando casi 20 años después– un «oceánico vacío» en la bibliografía lingüística hispánica. Y algo análogo cabría decir de otras publicaciones suyas, algunas de las cuales vieron la luz en revistas científicas internaciones o en volúmenes publicados por las editoriales más prestigiosas de la especialidad. Por fortuna, varias discípulas suyas están reuniendo algunas de estas contribuciones, que próximamente verán la luz con el sello de la Universidad de Sevilla.

La vida profesional de Portolés fue muy coherente y dinámica. Su curiosidad intelectual, su voracidad lectora y su honestidad le permitieron ir incorporando a su tarea investigadora y docente teorías y fuentes muy distintas, lejos del monolingüismo anglosajón al uso o de cerrazón local, articulándolas en un modelo congruente, sin forzar o simplificar la realidad lingüística para acomodarla a una hipótesis de partida.

Por eso, José Portolés ha representado un punto de referencia, ampliamente aceptado, en los estudios del discurso: conociendo como nadie la Teoría de la Argumentación, ha sido capaz de enriquecerla con aportes de la pragmática; su fino olfato sintáctico logró desarrollar complejos análisis de las relaciones entre unidades y estructuras de las lenguas y los usos discursivos, conjugando el dato empírico más en boga con análisis teóricos abstractos.

Tus colegas, discípulos y amigos no olvidaremos tu franqueza aragonesa, tu afabilidad y simpatía, tu inteligencia preclara, tu fino sentido del humor, compatibles con un trabajo personal exigente y riguroso, o la generosa dedicación de tiempo a tus doctorandos.

  • Manuel Casado Velarde es catedrático emérito de Lengua Española de la Universidad de Navarra y Óscar Loureda Lamas es catedrático de la Universidad de Heidelberg
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