Cartas al director
Cerco a Pedro Sánchez
Prisión para Ábalos y Koldo García. Una noticia demoledora para Sánchez, un estacazo en toda regla, la cosa empieza a ponerse negra para Pedro Sánchez, aunque es sobradamente conocida su capacidad de supervivencia. Pero nunca como este jueves ha conocido un día tan aciago. Primero, revolcón parlamentario; después, ingreso en prisión preventiva de José Luis Ábalos y Koldo García. Su mejor amigo durante años, su mejor colaborador, su hombre de confianza, su confidente, su principal asesor para asuntos políticos. Con Koldo muy presente también en su vida, aunque Sánchez lleva un tiempo distanciándose del vasco, como si apenas lo conociera. Cuando es de dominio público la estrecha relación de la llamada 'banda del Peugeot', en la que Koldo era chófer y hombre para todo. Ese intento de distanciamiento de Koldo –y veremos en el futuro próximo que hará lo mismo con Cerdán– demuestra que el secretario general del PSOE no las tiene todas consigo respecto al comportamiento de sus compañeros. Antes de que la UCO empezara a investigar y aportara al juez pruebas que podrían demostrar que han cometido delito, el propio Sánchez había recibido informaciones sobre Cerdán. Adriana Lastra, por ejemplo, en cuanto pudo y encontró motivo, se retiró a sus cuarteles de invierno asturianos. Su mala relación con Cerdán no se debía solo a rivalidades políticas.
A Pedro Sánchez se le está poniendo cara de jugador que se ve en peligro y no sabe hacia dónde tirar para que no se le ponga cara de perdedor. El ingreso en prisión de Ábalos y Koldo y el nuevo fracaso parlamentario han sido pésimas noticias del día, pero no por esperadas ninguna de las dos ha sido llevadera. Junts le ha echado abajo el techo de gasto, imprescindible para aprobar los presupuestos. En el caso de que efectivamente Sánchez pensara presentarlos, como dice que va a hacer.
Hay motivos para dudar de su palabra. Además, acabó el plazo hace más de dos meses y tendría que encontrar un argumento sólido para que fueran admitidos fuera de fecha. Que no habría presupuestos se daba por descontado desde hace mucho tiempo; apoyar en el parlamento a Pedro Sánchez ya no es un valor, sino todo lo contrario, y estamos ya en tiempo electoral. Primero Extremadura, luego Castilla y León, y nadie tiene la certeza de que se complete la legislatura, aunque Sánchez asegura que piensa aguantar.