Las caras de la noticia (17/11/2025)
Leire Díez
Leire Díez
Llega la hora de la verdad para la fontanera de las cloacas del PSOE, o «periodista de investigación», según su risible versión. Leire Díez está llamada a declarar este lunes a las 11.30 de la mañana en el juzgado de instrucción número 9 de Madrid, en calidad de imputada por delitos de cohecho y tráfico de influencias. La grabación del fiscal Stampa le ha puesto las cosas muy difíciles a Díez y también al PSOE, incluido su líder, que según la fontanera habría dado la orden de limpiar «al máximo» para intentar proteger a su mujer, Begoña Gómez. Los que querían presentar a Leire Díez como un personaje estrafalario sin más recorrido se encuentran ahora con que emerge un claro caso de guerra sucia del PSOE, que se une al del fiscal general como peón contra Ayuso. Asusta pensar hasta dónde habría llegado el sanchismo sin el dique de los jueces y la prensa que hace todavía su trabajo.
Isabel Díaz Ayuso
La presidenta de Madrid insistió ayer en su rechazo al registro de médicos objetores al aborto, que se niega a implantar en la región a pesar de las amenazas de la ministra de Sanidad de denunciar a la Comunidad en tribunales. Ayuso ha lanzado una batería de preguntas a Mónica García, que desnudan las malas intenciones del Gobierno: «¿Para qué quieres una lista negra de médicos si no la vas a utilizar? ¿Por qué te importa tanto? Si no tenemos libertad de conciencia, ¿qué queda?». El PP debería apoyar a la presidenta de Madrid en esta batalla moral, que supone además la defensa de un derecho constitucional.
Jordi Pujol
El caso de corrupción flagrante de la familia Pujol es uno de esos en los que la justicia se ha mostrado demasiado morosa. Hace once años que el patriarca Jordi confesó lo de su botín en Andorra y solo ahora comienza el juicio. Jordi Pujol tiene ya 95 años, está ingresado por neumonía y debería declarar el próximo día 24 en la Audiencia Nacional. La Fiscalía le pide nueve años de cárcel por asociación ilícita y blanqueo de capitales. Para sus siete hijos, la petición de penas va desde los ocho a los 29 años de prisión. Lo de este clan fue un escandaloso caso de corrupción, perpetrado gracias al paraguas del Gobierno catalán y robando el dinero de los catalanes. Como gobernante, Pujol resultó además un felón con España, pues sentó las bases para la ruptura, provocando una larga campaña de extrañamiento hacia la patria de todos, en especial con su inmersión lingüística. Pero incluso así, la justicia llega tardísimo ante un hombre muy deteriorado y que puede estar en sus últimos días.