Adolescentes en el Aula Abierta Catalejo
«Cuidar la justicia y la paz»: los agustinos y su proyecto educativo para personas en riesgo de exclusión
Adolescentes expulsados del instituto o personas en situación de desempleo y sin formación son los destinatarios del proyecto Aula Abierta Catalejo
Catalejo es el centro de la Fundación REDA (Red Agustiniana para la Educación y el Desarrollo) desde 2004 en San Sebastián de los Reyes, que acoge por las tardes durante la semana, fuera de horario lectivo, a más de treinta menores de entre 5 y 13 años que pertenecen a familias del municipio atendidas por los servicios sociales, que sufren dificultades laborales y personales.
Su objetivo es prevenir las posibles consecuencias de la desprotección y riesgo social en estos menores que pasan mucho tiempo solos, sin una referencia adulta positiva y sin normas ni límites o un espacio adecuado para relacionarse con sus iguales y realizar de forma satisfactoria las tareas escolares.
Los niños del municipio pasan la tarde en Catalejo
En cambio, por las mañanas hace cinco años que nació el Aula Abierta Catalejo, un proyecto de intervención socioeducativa hacia cuatro realidades que se encuentran en riesgo de exclusión social. Por una parte, adolescentes que han sido expulsados de los institutos; por otra, jóvenes sin estudios ni trabajo y, por último, personas adultas en situación de desempleo.
Marga Sánchez, coordinadora de REDA, explica que el programa responde a una necesidad para la que no existen muchos recursos públicos, como es la atención de adolescentes que han sido expulsados del instituto. Detectar esta necesidad social está en el origen de la fundación, que en estos años ha atendido a 450 jóvenes con este perfil.
Los agustinos ofrecen formación a personas adultas para su inserción laboral
Algunos de estos adolescentes deciden retomar los estudios un tiempo después, con la dificultad que esto supone, porque no existen centros que les ayuden a preparar las pruebas de acceso a ciclos de Formación Profesional de Grado Medio. Pero este es también uno de los servicios que se prestan en los locales de esta fundación. Sánchez cuenta, satisfecha, que cada año aumentan el porcentaje de aprobados en las pruebas de acceso: «El curso pasado llegamos al 100 %. Además, más del 70 % de los adultos que contactaron con nosotros ha conseguido un empleo. Aunque algunos de esos trabajos fueron temporales, nos parece que fue positivo y motivador para muchas de estas personas, ya que llevaban mucho tiempo sin, ni siquiera, ser convocados a una entrevista de empleo».
La atención personalizada y la búsqueda de itinerarios de trabajo son las señas de identidad de la manera de trabajar de REDA. De esta manera logran adecuarse a cada una de las personas, responder a sus necesidades de manera individualizada y lograr que cada cual desarrolle al máximo sus capacidades.
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