El arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, en una celebración eucarística
El arzobispado de Barcelona se desentiende de Custodio Ballester, pese a que se enfrenta a tres años de cárcel
El sacerdote diocesano respondió a una carta pastoral del cardenal Omella en la que invitaba a dialogar con el islam, lo que él tildaba de «imposible», por lo que ha sido acusado de un «delito de odio»
Un sacerdote de Barcelona va a ser juzgado por un supuesto «delito de odio» contra el islam, pero su arzobispado «no va a hacer declaraciones al respecto». El padre Custodio Ballester se sentará mañana martes en el banquillo de los acusados en la Audiencia de Málaga, pero la archidiócesis que pastorea el cardenal Juan José Omella estima oportuno «guardar un discreto silencio» sobre este tema, según han explicado fuentes diocesanas a El Debate. Los tres años de prisión que piden para Ballester no parecen inquietar en el palacio episcopal.
Custodio Ballester está acusado por un artículo que escribió hace casi diez años, el 28 de diciembre de 2016, titulado El imposible diálogo con el islam. Se trataba en realidad de una respuesta a una carta dominical publicada por el arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, que llevaba por título El necesario diálogo con el islam. En su artículo, el padre Ballester hacía afirmaciones que se pueden corroborar fácilmente consultando (casi) cualquier medio de comunicación: «En los países donde los musulmanes tienen el poder, los cristianos son brutalmente perseguidos y asesinados. ¿De qué diálogo hablamos, pues?».
«Una cosa es que no despreciemos a las personas por lo que creen y piensan y no las persigamos por ello, y otra bien distinta que tengamos que poner a hibernar nuestra fe para que no choque con el dogma progre y con la ideología que le ha declarado la guerra a nuestra fe. Con el gravísimo inconveniente añadido de que se la han declarado también a las personas», observaba el sacerdote de Barcelona en su artículo.
No harán ningún comunicado
Las reflexiones del padre Ballester no gustaron a la asociación Musulmanes contra la islamofobia, dirigida por Ibrahim Miguel Ángel Pérez. Se trata de una asociación que recibe ayudas del Ayuntamiento de Barcelona para la organización de actos y la celebración de jornadas, y que también ha recibido ayudas de la Generalidad de Cataluña.
Mañana martes, por tanto, un sacerdote diocesano de Barcelona se sentará en el banquillo de los acusados en Málaga, con la amenaza de tres años de prisión sobre su cabeza, pero su archidiócesis se desentiende de él y no tiene previsto emitir comunicado alguno.
